Un día de toros populares con mi mujer
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Era una tarde de sábado, una tarde calurosa, eran las fiestas de pueblo y es típico realizar las corridas de toros populares. Esa tarde decidimos salir mi esposa y sus primas (que también están muy buenas, tienen unas tetas muy ricas y unos culos muy grandes), por el calor que hacia todas estaban vestidas con shorts cortos y blusas cortas las cuales dejaban a la vista sus enormes y ricas tetas con sus pezones duros y bien parados.
Llegando a la plaza de toros nos encontramos con algunos amigos de las primas de mi esposa, ellos estaban tomando cervezas y con la música a todo volumen del auto de uno de ellos, en fin nos unimos a ellos cervezas iban y venían, y para ese momento ya uno de los chicos estaba besando a Pamela (una de las primas de mi esposa) el la tocaba por todo su cuerpo metiendo su mano en su blusa y la otra en sus pantaloncillos cortos acariciando su vagina, el ver aquella escena nos puso a todos calientes, entonces decidimos ir a un lugar mas privado para tener nuestra fiesta privada.
Fuimos no muy lejos de donde estábamos a la casa de uno de los chicos, llegando Pamela desapareció de nuestra vista con el chico que estaba, mientras yo estaba chupando en uno de los sillones de la sala las ricas tetas que tiene mi mujer, poco a poco empezamos a desnudarnos todos ya que cada uno tenia su propia pareja éramos 10 en total, Lorena, Pamela, Daysi, Daniela, Cristina, mi esposa, mi persona y 4 tipos mas que quien sabe quienes eran.
Yo estaba con mi verga muy parada hice que Daniela me la mame mientras yo chupaba la chucha de mi mujer, y ya no aguantaba mas así que abrí las piernas de mi mujer lo que mas pude y le metí mi verga de un solo empujón asta el fondo de su gran chucha, ella gritaba de placer mientras Daniela y Lorena eran penetradas por el culo, Daysi se dedicaba a mamar una verga enorme mientras era penetrada por la mano de uno de aquellos tipos, entonces mi mujer se vino gritando como solo ella lo sabe hacer y mientras se movía yo le decía al oído si quería que le metan otra verga por el culo, el haberle dicho eso la hizo venir otra vez diciendo entre gritos:
– Si… quiero todas las vergas dentro de mí.
Entonces la puse en cuatro y cada uno le iba metiendo su verga por donde quería, por su chucha o por su culo, mientras tanto Daniela era llena de leche, la chucha grande que tiene Lorena pedía doble penetración, y fue uno de los tipos conmigo y la penetramos los dos por la chucha haciendo que ella se venga una y otra vez, mientras Daysi ingería leche por su boca. Mi esposa ya había terminado cuatro veces y entonces ya no podía mas del cansancio, entonces pidió que todos terminen su leche sobre ella o donde nosotros quisiéramos, y era obvio que todos pasamos de uno en uno metiendo muestras vergas en su chucha y terminando adentro, esa chucha se lleno de leche calientita yo fui el ultimo en terminar en ella y cuando lo hice salía mares de leche de su chucha gigante.
Una vez ya todos exhaustos y que también por el trajín de haber culeado a esas ricas putas, nos preguntábamos “¿Donde estaba Pamela? no nos imaginábamos que ella tenia la mejor parte ya que había estado cogiendo con el chico que se fue el hermano y dos amigos del hermano que estaban en la casa, nosotros veíamos asombrados como la penetraban por todos lados y derramaban su leche sobre sus ricas tetas y le metían en la chucha para terminar también en el culo y en la boca asta quedar totalmente rendidos.
Desde aquella vez nunca nos perdemos una corrida de toros populares porque siempre termina igual, y a mi esposa y a sus primas les encanta tener la boca, la chucha y el culo llenos de leche todo el tiempo.