Solos en mi carro follando como locos
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Hola a todos, mi nombre es Eduardo tengo 19 años y les contare cuando termine en mi carro con una mujer que conocí el primer día y aclaro fue mas o menos mi primera vez, porque la primera vez que lo hice no fue muy bueno.
Estaba yo un sábado solo en mi casa cuando me llamaron al celular unas amigas diciéndome que saliéramos a un bar nuevo. Luego nos encontramos por la calle y nos dirigimos al bar, ya dentro de este la música estaba excelente, mis amigas borrachas y entre ellas había una nueva se llama Carolina y tiene 18 años, hablamos como unos 5 minutos mientras bailábamos y comenzamos a rozar nuestros cuerpos de forma caliente, ella llevaba un vestido blanco que comenzaba desde las tetas y terminaba muy cerca de su culo. Es trigueña, cabello negro, ojos marrones y un cuerpo de locura con una tetas tipo medianas pero de buen tamaño, un culo grande y delicioso y unas piernas deliciosas que se veían más grande con el vestido tan corto que tenia puesto el cual me traía loco.
Mientras bailábamos la senté en una silla de la barra y me acerque a su boca para besarla a lo cual se dejo inmediatamente, besaba de una forma lenta pero arrechante y a medida que pasaban los minutos nos besábamos con mas velocidad, al notar su calentura y la mía por supuesto, luego le abrí las piernas y mirando con lujuria note que llevaba una hilo blanco lo cual me puso aun mas caliente y sin pensarlo 2 veces le hable al oído diciéndole que nos fuéramos a mi carro, a lo que no contesto nada y lo tome como un si.
Le pedí a mi primo que me diera un condón porque no tenia en esos momentos, y enseguida salimos. Nos montamos en mi camioneta (con los vidrios polarizados) y me dirigí a la puerta de la casa de un amigo, al cual llame al celular para que estuviese pendiente por si la policía llegaba. Ya parqueados me le acerqué rápidamente y comenzamos a besarnos con locura. Luego comencé a bajarle ese top del vestido que me tenia loco porque quería ver que tetas se ocultaban bajo ese vestido… me lleve una sorpresa! tenia los pezones rosaditos como si nunca los hubiesen tocado. Yo solo le escuchaba en voz baja:
– aaahhh… mmm… siiiiii…
Mientras movia su cuerpo como toda una experta, al mismo tiempo que meti mi mano en su hilo blanco y note que estaba muy húmeda… lo cual me puso todavía más caliente y sus gritos comenzaban a aumentar de sonido haciéndose más fuertes y más fuertes, cuando de repente se me acerca al oído y me dice:
– Quiero hacerte un blow job… puedo?
A lo que yo respondí:
– Por supuesto mi vida, es toda tuya… juega con ella todo lo que quieras.
Comenzó bajando poco a poco besando mi cuello y mi pecho mientras me iba masajeando la verga lentamente, me desabrochó el jean y me la sacó, se dio cuenta que la tenia bastante caliente y me dijo:
– Así me gustan, pero no la conocía tan grande, es mi tercera vez teniendo sexo y me encanta.
Luego bajo rápidamente y se la metió en la boca, lamiendo la cabeza primero para después comenzar a bajar por esta, lo hacia deliciosamente. Sentía a veces el ligero roce de sus dientes lo cual me volvía aun más loco y yo comencé a agarrarle la cabeza para yo hacer el movimiento rápido. Escuchaba sus suspiros:
– mmm… ah ah ah… me encanta, esta grande, me gusta así, mmmm…
Y yo respondía:
– Así también me gustas tu, deliciosa y con una boca insaciable – al mismo tiempo que le metía un dedo por la vagina.
Luego note que estaba bajando el ritmo de la chupada y la levante y nos pasamos a la banca de atrás de la camioneta, continuamos jugando con nuestros genitales un rato, cuando presione dos botones a lado y lado de la camioneta y el espaldar termino siendo una cama. Me puse encima de ella y comencé a rozar mi pene con su clítoris caliente a lo que suspiraba aun más duro cuando me dijo:
– Métela ya… no aguanto mas esta calentura por favor yaaaa…
Comenzamos un ritmo de mete y saca un poco rápido y yo le decía al odio:
– Me gusta tu vagina… toma mi pene y comételo, mmm… te quiero todita para mí, quiero tu vagina.
Ella comenzó a moverse aun más rápido, comenzó a calentarse mas y como en unos 20 minutos (después de haber cambiado a 2 posiciones distintas) se vino y comencé a sentir ese jugo delicioso envolviendo mi pene. Lo saqué y le dije que me lo mamara porque yo aun no me había venido, algo que no dudo en hacer. Comenzó a chupar maravillosamente, mientras jugaba con mis testículos y de repente le dije:
– Mmmm… me vengo me vengo!.
La sacó y se la dirigió a las tetas. Solté mi chorro de esperma y se la puse en todo el pecho, luego me dijo:
– Todavía no quiero tragármela porque no se como sabe… pero en una próxima ocasión podremos experimentar aun más.
Nos limpiamos, fuimos a comer y la deje en su casa como a las 5:00am… nos despedimos con un beso y le dije:
– Mañana voy a salir en mi bote… quieres ir?
Ella respondió:
– Por supuesto, puede ser nuestra segunda experiencia…
Me dio un beso y se bajo del carro.