Sexo explicito con mi esposa despues del trabajo (parte 2)

…mi glande seguia frotando su apretado ano mientras ella retorcia su cara de placer. Yo no dejaba de frotarle mis dedos.sobre su clitoris con mas fuerza, mientras besaba y saboreaba su preciosa boca. Nuestras lenguas se trenzaron mientras seguia entrando por atras. Finalmente la penetre despacio y pegué el envión para insertar todo mi falo en su culo. Ella empujaba hacia mi pene con fuerza, como deseperada por sentir mi brutal embestida hacia ella. Sentía como sus suaves nalgas tocaban mi pelvis y como también subía un aroma de mujer hacia mi nariz y mi boca. El sabor del sexo de mi lujuriosa esposa era algo que me facinaba y que me exitaba también cuando me masturbaba a solas. Su concha era algo que nunca me quería perder.

Seguia y seguia taladrando ese estrecho culito cuando sentía que iba a acabar. Fue en ese momento que ella me pidió que acabase dentro de su ano, y asi me dispuse a hacerlo: chorros de semen salían de su ardiente cola.

Ambos estabamos un poco cansados de aquel sexo desenfrenado. Nos pegamos un buen baño para quitarnos un poco los olores a sexo que quedaron impregnados en nuestros cuerpos y cada cual siguió sus quehaceres. Yo me dispuse a trabajar en mi alcoba sobre un nuevo libro que tratará sobre el ciber-sexo en el siglo XXI y mi mujer terminaba de hacer algunas tareas de limpieza.

No podia dejar de imaginarme ese trigueño culo redondeado golpeando con fuerza mi falo y ella en cuatro, mirandome desde atrás mientras me la cogia con gusto. La guarra de mi mujer estaba realmente contenta de ser penetrada por el culo mientras le metía mis dedos por su vagina, que por cierto, estaba empapada de su exitante flujo vaginal. No puedo dejar de pensar como mi pija se deslizaba con tanta rapidez por la mejestuosa cuevita muy bien lubricada por sus vigorosos liquidos.

Mi pija no dejaba de erectarse durante aquella tarde de sexo, mientras me disponía a escribir las primeras paginas de mi libro que tal vez llamaria: “Julieta y el ciber-sexo en el siglo XXI”, una obra que podria mezclar el sexo mas exolicito con la ciencia ficción. En fin, Julieta, mi atractiva y esplendida esposa, seguía sorprendiendome con su espectacular cuerpo y me caía de sorpresa en mi alcoba con solo un pantaloncito de jean bien cortito que le dejaba ver sus redondas y perfectas nalgas. Dia por medio teniamos sexo por un buen rato diciendome que queria hacer una gran colaboración para mi libro. Yo por supuesto encantado de que su frescura femenina y sus encantos de zorra lujuriosa, inunden mis paginas, tan esteriles (al principio de mi proyecto) por no saber que poner. Por supuesto, algunas ilustraciones y fotos voy a poner de ella, pues su culo merece tal recocimiento a mi obra.

Lo que buscaria en mi proximo proyecto es que ella tenga sexo grupal o lesbico para mi serie de cuentos e historias de “Julieta y el ciber-sexo en el siglo XXI”, algo que enriquezca estas historias, basadas en experiencias reales.