Sexo en el probador, que excitante

Despues de un largo dia de trabajo, termine en la seccion de ropa masculina, donde descubri una buena oferta en trajes. Y aunque no los necesitaba la ropa siempre a sido mi perdicion.

Intentaba decidirme entre dos trajes, pero no lo tenía claro. Asi que decidi probarme los dos y ver cual era el que mejor me quedaba.

El primero era un traje negro, el pantalon era de pierna pitillo, lo que remarcaba mejor mi culo, y dibujaba un buen bulto. Me gustaba bastantante. Observe como un hombre desde otro probador no se perdía detalle, mirando a través de un hueco que dejaron las cortinas al cerrarse.

Me desnude despacio, colocando el traje en la percha, para que el hombre pudiese disfrutar bien de mi cuerpo, tengo un buen fisico y me gusta exibirme. Me coloque la polla, un poco morcillona ya, y me probe el traje gris. El corte era bastanta mas clasico pero me quedaba bien, me gustaba el color. La verdad es que no sabia muy bien con cual quedarme.

Seguia ensimismado pensando cual de los dos trajes quedarme, cuando me percate que el hombre seguia mirando. La situación me pareció excitante, por lo que decidí darle una mejor vista, moviendo un poco la cortina y acercandome al hueco desde donde podia verme ,   facilitandole la vision, poco a poco las miradas fueron siendo más descaradas, y yo mas provocador.

Estaba desvestido, con tan solo un bóxer negro,un boxer brasileño ajustado que marcaba perfectamente mi paquete.

Vi al hombre como cada vez mostraba mas interes en ver lo que ocurría dentro del probador. También se notaba una erección considerable dentro de su pantalón. Por lo que me animé a llamarle para que pasara dentro con la excusa de ayudar en mi elección sobre los trajes. El se quedo un poco sorprendido. Salio de su probador, miro hacia ambos lados y paso dentro ahora si se cerró bien la cortina tras el.

– Me llamo Alberto- me dijo.

– Yo soy David- respondi – la verdad es que no se muy bien con que traje quedarme y como te he visto tan interesado, crei que podias ayudarme siéntate en esta banqueta y dame tu opinión.

Me comentó que no había podido evitar fijarse, que no era ningun prevertido , pero que tenía un cuerpazo y que no habia podido resistirse.

Yo sonrei, y el aprovechó para acariciarme el brazo. Yo estaba ligeramente empalmado, y tenía una cara de vicioso que no podía con ella.

Note como la forma de su polla abarcaba gran parte de su pantalón de chándal. Me arrodille frente a el y sin bajarle el pantalon comencé a chupar su polla por encima de la tela. Tenía muy buena pinta, se marcaba una buena polla y muy dura. No pude aguantar más y baje sus pantalones. La polla de Alberto era gorda, bastante blanquita y con un capullo rosado que sobresalía especialmente. Mediría unos 19cm, tenía los huevos gordos, y no iba depilado, con una mata de pelos algo asalvajada, aunque parecía que había intentado recortarsela un poco. Le daba un aire de hetero descuidado que me ponía a cien. Cuando acerque mi nariz senti un olor una mezcla entre restos de orina y precum. Olía a gloría, he de reconocer que siempre me ha gustado el olor de una buena polla.

Primero le chupe el capullo, que ya estaba totalmente humedecido de precum, después le chupe los huevos, para acabar entreteniéndome con una chupada más extensa en su magnifica polla. El no paraba de bufar y gemir mientras apretaba mi cabeza para meterme mas la polla hasta el fondo de la garganta.

Me gustaba el sabor de esa polla, y el punto brusco con el que Alberto me follaba la boca.Yo intentaba mirarle la cara mientras el trataba de introducir todo su enorme rabo. Yo casi no podia respirar, y notaba grandes arcadas cada vez que su capullo traspasaba mi garganta, pero era una sensacion que me encanta.

Cada vez que sacaba su polla para poder dar una bocanada de aire le pedia mas, y eso le ponia aun mas cachondo, y volvia a metermela aun mas fuerte, mas adentro.

Notaba sus pesados cojones golpear en mi barbilla, a la vez que me brotaban grandes lagrimones.

El estaba super cachondo, y acabo colocandome contra la pared y comenzo a mover la cadera como si realmente estuviese follandome , por mi posicion no podia moverme , y su brutal follada me hacia un poco de daño, aunque la situacion y su comportamiento me ponia muy cachondo.

Mi polla estaba muy dura, y mientras el seguia con su follada, yo saque mi polla del boxer, que estaba completamente humedo de precum. Comenze a menearmela con ganas, estaba muy cachondo.

Crea que a Alberto le debio dar morbo por que comenzo a gemir con ganas y acelero aun mas sus movimientos. Note como su polla se comenzaba a hinchar, sabia que iba a correrse en breve.

Saco su polla y comenzo a pajearse frente a mi cara, hasta que unos cuantos chorros de leche salieron disparados en mi cara en mi pecho, sentir esa abundante y caliente corrida me dio tanto morbo que yo tambien me corri en ese momento llenando mi pecho de mi propia leche.

El volvio a metermela y yo procedi a dejarle la polla bien limpia, saboreando hasta la ultima gota de semen que colcaba de su capullo. Cuando ya nos tranquilizamos un poco y su polla ya estaba flacida, se coloco el pantalon, cogio mi pantalon saco mi movil y marco un numero.

– Ahi tienes mi numero, llamame cuando quieras- dijo el.

Me hizo incorporarme, me dio un beso largo y humedo, y me miro con desgana.

– Mirate pareces una puta, todo cubierto de semen. Que morbazo me das.

Salio del probador y ahi me dejo desnudo, cubierto de semen y con ganas de volver a verlo.