Mi primer polvo en Mi Primer Trabajo

Hola, me llamo Sandra, mido 1.63, peso 62 kilos, soy morena con el pelo largo, tengo ojos verdes y mis medidas son 95-58-82.

Lo que voy a contar me sucedió cuando tenía 20 años, por aquel entonces yo estaba buscando trabajo, que siempre viene bien tener un dinerillo extra para los caprichos de una. Entonces mi madree habló de una amiga suya que acababa de quedarse sin la chica que cuidaba de los sus hijos todos los sábados por la noche. Al principio no me acabó de agradar la idea ya que entonces no podría salir de fiesta ningún sábado por la noche, pero luego me dijo mi madre que no sería hasta muy tarde, como mucho a las 2 o las 3 de la madrugaba regresarían los padres, así que acepté el trabajo. Me pagaban 10 ? la hora y estaba toda la tarde, así que estaba muy bien.

Pues llegó el primer día y estába super nerviosa, la madre me dijo lo que tenía que hacer, tenía 2 hijos y 1 hija, del mayor no tenía que preocuparme ya se cuidaba sólo, pero a los dos peques tenía que darles de merendar, la cena, bañarlos, acostarlos, jugar con ellos, etc, etc. El primer día acabé cansadísima aunque lo peor fue no poder fumar en toda la tarde (la madre me había dicho que si era fumadora no fumara delante de los chicos), así que después de acostarlos me senté en el salón a ver la tele y me fumé varios pitillos, al rato llegaron los padres, me despedí de ellos y salí a buscar a mis amigas. Al salir de la casa justo llegaba el hijo mayor a casa, se quedó algo parado y me dijo:

-Hola

-Hola- le respondí

-¿Quién eres?

-He estado cuidando de tus hermanos hoy

-No sabía que habían llamado una niñera nueva mis padres, mejor no me gustaba la de antes

-¿A sí, y yo te gusto?

-Es muy pronto para decir eso, hasta otra.

Y así nos despedimos, yo me fui de fiesta esa noche y por momentos estuve pensando en este chico, era moreno con el pelo corto, y tenía un buen cuerpo en general. Durante toda la semana me vino a la cabeza de vez en cuando nuestro encuentro, sin darme cuenta estaba esperando ansiosa el sábado para ver si me encontraba de nuevo con él al salir.

Llegó el sábado, pasé toda la tarde sóla con los dos pequeños, los acosté, fui a arreglarme un poco para salir luego y como el sábado anterior me fui al salón a ver la tele y fumarme unos pitillos, pero me había olvidado el tabaco en casa, aunque en ese momento oí que habrían la puerta, “Qué suerte!!” pensé, “hoy llegan antes los padres”, pero cuando llegaron al salón no eran los padres, era el hijo mayor.

-Hola, nos volvemos a ver- Me saludó

-Hola, no tendrás un cigarro? -Le pregunté

-Si, pero no quiero que mis padres sepan que fumo

-No te preocupes fuma tranquilo, ellos saben que yo fumo, si huelen a tabaco cuando vengan les digo que he sido yo.

Así que encendimos un cigarro cada uno y empezamos a hablar

-¿Cómo es que has llegado tan pronto hoy?

-Tengo un amigo de exámenes, otro con la novia, otros de viaje, me he quedado solo así que me he venido a casa.

-y tú? no tienes exámenes? ni novia?

-No, y novia tampoco, mi última novia es la de mi amigo. Ahora estarán follando, cuando estabamos juntos todos los sabados follabamos, me gustaria estar en su lugar jaja

En ese momento vi como me miró el escote, como me había arreglado para salir luego iva bastante escotada y llevaba una minifalda bastante corta también. Yo estaba empezando a calentarme un poco, me los estaba imaginando follando a él con su antigua novia y eso sumando a que hacía unos 5 meses que no follaba me excitaba. No le dije nada de que lo vi mirar el escote, al revés como estábamos sentados uno enfrente del otro ( 2 sillones con una mesita en medio) me levante para cojer otro pitillo de forma que pudiera ver mejor mi escote.

-¿Fuego? – me pregunto

-claro

-¿Siempre vas vestida así para cuidar chicos?

-Eso es porque en cuanto lleguen tus padres saldré de fiesta

Seguimos hablando y fumando hasta que se acabó todo el tabaco, mientras hablabamos yo seguía viendo como me miraba y eso me gustaba y cada vez estába más caliente, en esas que llamaron sus padres, y me dijeron si me podría quedar hasta más tarde, que llegarían sobre las 5 o las 6 de la noche, les dije que ningún problema. cuando colgué eran las 2 de la noche ya, faltaban 3 horas y sin tabaco y estaba muy caliente o no menos que el chico.

-Bueno pues yo me voy a dormir – me dijo

-Ya no quieres mirarme mas el escote entonces?- le dije, se sobresaltó al oirlo, e intentó negarlo, hasta que le dije que me gustaba que lo hiciera, que si quería también podía tocar, que eso me gustaba aún más que me lo miraran. Así que cambió de idea y se vino a mi lado, empezó a tocarme las tetas por encima de la ropa, yo veía como su verga crecía, así que me quedé en sujetador

-Así puedes tocar mejor- le dije

Entonces el cogió y me quitó el sujetador,-Y así aún puedo tocar mejor- me dijo, empezó a tocarme las tetas ya desnudas y a besarmelas, un pezón después de el otro, empezaron a ponerse duros y yo mientras tanto le cogí la verga que estaba creciendo por momentos, ya no podía aguantar más así que lo tumbé en el sofá y empezé a comerle la boca mientras le quitaba como podía los pantalones y los slips, él empezó a bajarme la minifalda también y el tanga que llevaba abajo, me levanté para acabar de quitarmelo todo mientras él se acababa de desnudar también, y seguimos con lo que habíamos empezado, le besaba mientras me gustaba como me cogía el culo, notaba su poya dura y caliente cerca de mi, así que dejé su boca para empezar a chupar su poya, me sorprendió su tamaño, es la mayor poya que he probado nunca, medía unos 20 centímetros y era muy gruesa también, la estuve chupando un buen rato, hasta que me avisó que se iva a correr, entonces paré y me dijo:

-Deja te lo devuelva, sientate en el sofa- yo le hice caso, me senté y él se colocó entre mis piernas, las abrió y empezó a chuparme el coño, nunca antes me habían chupado el coño tan bien como él lo hizo, luego me dijo que era la primera vez que chupaba un coño, pero fue realmente bueno, fue tan bueno que me corrí sólo de chuparmelo, le dije que ahora se sentara él

-Es aún muy pronto para saber si te gusto, o ya lo sabes?- le dije

-Creo que dependerá de lo que me hagas ahora- dijo, así que sin decir nada me senté en sus rodillas y poco a poco me meti su poya, cogí sus manos, las puse en mis tetas y empezé a moverme para un lado y otro y luego para arriba y para abajo, al poco rato empezó a decirme que sí que le gustaba que no parara, él empezó también a moverse para que entrara mejor su poya en mi, estuvimos así hasta que nos corrimos, llegamos al orgasmo casi a la vez los dos. Entonces él se fue a dar una ducha, yo me quedé sóla en el salón queriendo repetir, así que al rato me fui a buscarlo, entre al baño:

-Oye, has follado alguna vez en la ducha?- le dije directamente mientras entraba con él, él me sonrió

-No, pero eso habrá que cambiarlo- me puso contra la pared y empezó a besarme y tocarme las tetas, mientras tanto yo me estimulaba el clitoris con mi mano y al poco vi que su poya ya estaba creciendo de nuevo, así que baje para chuparsela otra vez hasta que volvió a estar bien grande, él me puso contra la pared de nuevo y volvió a besarme y tocarme pero esta vez también me metió la poya hasta dentro, y empezó a darme embestidas, me encantaba, mientras tanto yo le cojía con fuerza el culo ( que es algo de lo que no me puedo resistir en los hombres), estuvimos follando en la ducha hasta que se agotó el agua caliente, fue el segundo polvo de la noche, pero no sería el último, aún quedaba una hora para el regreso de sus padres.

-Son las 4, hasta las 5 no vienen mis padres no?, me voy a mi habitación, me acuestas como a mis hermanitos?

-Claro, he de cuidar bien de ti.

Así que nos fuimos a su habitanción y ese sí fue el último polvo de la noche, y fue el mejor,fue genial. Empezamos con un 69, nos chupabamos el uno al otro muy despacio sin prisa pero sin pausa, luego me tumbó en la cama y me tuvo un rato muy largo sin hacer nada pero gozando como nunca, me besaba por todos lados, empezó por el cuello por los pechos el vientre, estaba en cada zona como 5 minutos y lo hacía muy bien, me excitaba como nunca, luego empezó a chuparme por al lado del coño pero sin llegar a tocarlo y me estaba poniendo muy caxonda y le decía que llegara ya al coño pero no lo hacía, lo que me hacía poner aún más caliente, estaba casi llegando al orgasmo y no me había tocado aún el coño, hasta ese momento no creía que eso fuera posible, al final llegó a él, y me corrí al muy poco tiempo de que empezara a chuparlo, acto seguido cojió y me metio su verga que ya estaba lo más dura y grande posible, y volví a correrme otra vez y él también por supuesto.

En total había tenido 5 orgasmos esa noche y con un chico de 17 años, nunca pensé que con tan poca experiencia pudiera hacerme lo que me hizo esa noche, así que quedamos en repetirlo.

Sus padres llegaron al rato, me despedí del chico con un buen beso con lengua sin que lo vieran los padres y me fui directa a casa, ya había tenido bastante por esa noche.

A partir de ese día, quede algunas noches con el chico, a veces un sábado cuando no estában sus padres, a veces cualquier otro día que pudiéramos estar sólos.

Bueno, espero que os haya gustado, me ha salido un poco largo, pero bueno quería contarlo todo.