Mi esposa, putisima desde la adolescencia – I, II
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En esta serie de relatos les contare la historia de mi esposa (de nombre Cindy) y lo puta que ha sido desde que la conocí.
Ahora ella tiene 34 años y yo 36, estamos casados hace 10 años y nos conocimos cuando ella tenía 18 y yo 20, ella estaba en el último año de prepa y era la clásica chava a la que la mitad de los chicos de la preparatoria se la querían coger, 1.65 de altura, no güera pero de piel clara, piernas gruesas y muslos deliciosos, unas caderas y nalgas hermosas bien puestas y paraditas, tetas ni grandes ni pequeñas pero muy llamativas, una cintura perfecta y la verdad muy bonita de su cara, así que no era extraño que tuviera filas de pretendientes y menos con las faldas tan cortitas a medio muslo que solía usar.
Aun teníamos 18 y 20 años cuando empezamos a ser novios, a veces me sorprendía que a quien le hizo caso fuera a mí, pero como siempre fui de los buenos en el equipo de futbol de la universidad pues al parecer eso le gustaba mucho.
Al principio de la relación era muy reservada era difícil incluso de besarla y mucho más un faje, era toda una santa, aunque su forma de vestir siempre fue sexy, quien pensaría que detrás de esa carita inocente se encendía una chava putisima y adicta a la verga y al semen, a penas cumplimos 4 meses de novios estando en el coche en un lugar apartado de la ciudad empezamos a besarnos y al parecer la calentura le ganó pues de pronto mientras nos besábamos empezó a acariciar mi verga por encima del pantalón lo cual me sorprendió y de pronto ya estaba con sus manos desabrochándome el pantalón, saco mi verga, al parecer le dio gusto ver el tamaño pues me mide 17 cm, la observo con lujuria, la empezó a acariciar y de un momento a otro ya me la estaba mamando, lo hacía de una forma que evidentemente no era de una inexperta, fue ahí donde me di cuenta que no era la chica inocente que creía si no que ya tenía experiencia en el sexo lo cual me genero un poco de celos al principio pero la forma en que me la mamaba y jugaba con sus manos en mi verga me hizo olvidar eso.
Después de unos 10 minutos de chupármela tuve el mejor orgasmos que hubiera tenido hasta ese momento, su boquita se llenó de semen y lo trago todito, lo que escurrió lo limpio con la lengua, después de que termino levanto la cabeza me miro a los ojos y nos volvimos a besar mientras ella aun jugueteaba con sus manos con mi verga, esa forma de chuparla no era de una chica de 16 años… me había mostrado su verdadera personalidad y su encanto por la leche pues a partir de ese momento cada que había oportunidad me lo chupaba y se la comía toda, me lo exprimía hasta la última gota…
Después de eso detono nuestra vida sexual, aunque aún no me dejaba cogérmela nos hacíamos sexo oral mutuamente por lo menos dos o tres veces por semana, a los 10 meses por fin la convencí de coger, ella me decía que era virgen pero dentro de mi algo me decía que alguien que la mamaba como ella no podía ser virgen, efectivamente volvió a suceder, cuando me la cogí por primera vez me di cuenta que no era virgen ya tenía experiencia la muy puta, pero nuevamente su forma de coger me hizo olvidar el hecho de que ya alguien más antes que yo le había metido la verga, o quizá varios, no lo sabía en ese momento, la verdad nunca me importo ni le reclame el haberme mentido en eso, era yo ahora quien disfrutaba de ella, de toda su cachondes y de ese culo que decenas de chicos deseaban y con eso me bastaba…
A partir de ese momento empezamos una vida sexual completa, cogiendo por lo menos una vez a la semana, poco a poco fui descubriendo mucho de ella desde cuantas vergas diferente se había comido (yo fui su 3ra), hasta sus fantasías más sucias, me conto que deseaba tener 2 vergas dentro de ella al mismo tiempo, que deseaba ser vista desnuda o masturbándose por desconocidos, que pensar en eso le excitaba mucho, que deseaba ser puta por una noche y saber lo que se sentía cobrar por tener sexo, que deseaba estar en un cuarto grande donde hubiera unos 10 hombres dotados, cada uno en un sillón diferente e ir pasando de hombre en hombre como toda una puta hasta coger con todos para después los 10 la llenaran con una lluvia de semen, le encantaba imaginar que los hombres se masturbaban pensando en ella, me decía “amor imagínate cuanta leche me han dedicado entre todos los que se la han jalado pensando en mi”… esa era su mente sucia y perversa cuando se trataba de sexo, al principio me costó asimilar que mi novia me estuviera diciendo que deseaba probar otras vergas o que le excitaba que los hombres la vieran y se masturbaran pensando en ella, pero poco a poco empezó a gustarme la idea de tener de novia a una mujer así de puta y también empezó a excitarme la idea de verla coger y de disfrutar otras vergas más grandes que la mía, la empecé a ver como mi actriz porno…
Solo por diversión, en una ocasión cuando le di un aventón en coche a la prepa, le pedí que se fuera a clases sin ropa interior y con esa faldita tan corta habría el riesgo de que alguien le pudiera ver su rica y depilada panochita pues todo el tiempo se depilaba casi por completo, solo dejaba un poco de bello en la parte de arriba como toda una estrella porno, ella me sonrió y acepto sin problema la muy puta, así que antes de bajarse del coche se quitó la licra y la tanguita que traía y me las lleve a casa, ese día yo no tenía clases en la universidad así que mientras estaba ella en clases y yo en casa, solo me la pase pensando en que algún chico le veía por debajo de su falda o que incluso ella les mostraba intencionalmente o que alguno la llevaba a la parte de atrás de la prepa, le levantaba la falda y le metía la verga, y tuvimos esta conversación por mensaje de texto.
Yo-. ¿Amor como te estas sintiendo con tu rica panochita al aire?
Cindy.- hay amor no manches, la tengo mojadisima, me siento putisima haciendo esto, el solo hecho de pensar que me la pueden ver me excita mucho, ni me puedo concentrar en la clase, no me hago responsable si alguien me termina cogiendo el día de hoy aquí en la prepa eh!!
Para ese entonces ya hablamos abiertamente sobre que algún día alguien mas se la cogería frente a mí y en qué haríamos realidad todas sus sucias fantasías de probar muchas más vergas…
Continua la conversación…
Yo.- Si alguien te coge quiero fotos eh, y que me cuentes todo a detalle…
Cindy-. Ya amor no digas esas cosas que haces que me excite más, ¡si sigues le diré a Santiago que quiero que me coja eh!!
Santiago era un chico que todo el tiempo, como muchos, le tiraba la onda, era su compañero de clases y ella decía que seguramente tenía una vergota porque con uniforme de deportes se le veía un bulto enorme y que si yo le daba permiso sin duda se comería esa verga.
Yo.- Adelante amor, tienes mi permiso, cógetelo, sácale toda la leche a esa verga que sé que te encanta…
Cindy-. Yaaaa amor ya no me digas esas cosas que se me moja más y más, cuando salga de clases quiero que me des una cogida como nunca antes, quiero que me trates como una puta eh!!
Cuando salió de clases cogimos durísimo, la experiencia de sentir como alguien más podía ver su vagina la convirtió en una chica aún más puta de lo que ya era cuando tenía la verga adentro…
Empezamos a salir de fiesta o al centro comercial con ella sin ropa interior, ese cosquilleo que se sentía por el nervio de que alguien pudiera verle su depilada vagina, a ambos nos encantaba…
También empezamos a coger mientras veíamos videos porno, eso la ponía mucho más caliente, le encantaba que cogiéramos con videos de chicas que lo hacían con 3, 4 o más hombres a la vez, era obviamente su fantasía más deseada. Iniciamos por comprar un consolador que era más grande que mi verga, cuando cogíamos y lo usábamos se volvía loca, toda una puta deseosa de verga, la ponía de perrito y mientras ella se daba con el consolador por la vagina, yo le da daba sexo anal, esa doble penetración la hacía ver las estrellas, ambos sabíamos que cuando fueran dos vergas de verdad sería maravilloso…
Cuando nos juntábamos con amigos le pedía que llevara vestidos cortitos, minifaldas o minishort y tacones, la piernas se le veían espectaculares, gustaba de usar falda del tipo porrista con tangas muy pequeñas, ya estando con ellos me encantaba ver como la miraban y morboseaban viéndole las ricas piernas que tenía, obviamente ella también lo disfrutaba, aunque algunas vez si me llegaron a decir 2 de mis amigos que le dijera a mi novia que por favor fuera vestida más discreta porque sus novias se ponían celosas porque los descubrían viéndola, les hice la misma pregunta a los dos, ¿En serio quieres que ella ya no use esas falditas y esos vestidos cundo estamos con ustedes? A lo que obviamente no supieron que contestar jajajaja, obviamente querían poder seguir viéndola así de sexy, y a ambos les dije, ¡tú difrutalo!! Obviamente ambos se sorprendieron por mi forma de responderles, pero es que la verdad en este punto me excitaba demasiado ver como otros hombres deseaban a mi novia y el como ella lo disfrutaba…
Bueno creo que ya me alargué un poco, dejare este relato hasta aquí y en él los siguientes les seguiré contando lo puta que siguió y sigue siendo mi esposa, de cómo cumplimos algunas de sus fantasías y el cómo ha disfrutado de otras vergas más grandes que mis 17 cms…
PARTE II
Este relato es la segunda parte de la historia de lo puta que ha sido mi esposa Cindy desde que la conocí y hasta la fecha, si no has leído la primera parte te recomiendo hacerlo antes de leer este relato para que tengas el contexto completo, les hago la aclaración que todo lo que escribo en estos relatos es completamente real.
Ya con 19 años entro a la universidad, estudio ingeniería industrial, y pues como siempre y en cada lugar donde estuviera había varios chavos que le tiraban la onda y que darían lo que fuera por cogérsela, afortunadamente siempre entre nosotros hubo la confianza de que me platicara todo lo que le decían esos chavos, incluso bromeábamos con el tema de que como tendrían la verga esos chavos o cuando cogíamos fantaseábamos que yo era alguno de esos chicos y me llamaba por su nombre.
En una ocasión, ella ya con 22 años recién cumplidos, me comento que iría a una fiesta que organizaron sus compañeros a lo que obviamente no me opuse, incluso la fui a dejar a la fiesta a eso de las 5 de la tarde y la recogí a eso de las 10:30, es aquí cuando entra al coche me doy cuenta que está un poco ebria, ese día se había ido vestida con un minivestido color blanco, de esos a los que llaman putivestidos por lo cortitos de arriba y abajo, también llevaba tacones altos, así que ya imaginaran lo sensual, provocativa y putisima que se veía, como ya les dije, me encantaba esa sensación de saber que otros hombres la deseaban o que la desvestían con la mirada o incluso le proponían coger con ellos, es por eso que no le recrimine que fuera vestida así, sabía que eso haría que los hombres no dejaran de verla y desearla…
Después de recogerla en la fiesta me pidió que fuéramos a nuestro lugar secreto fuera de la cuidad, aquel donde me la mamo por primera vez y que usábamos de vez en cuando para coger al aire libre, cuando llegamos y apague el coche inmediatamente se me lanzo a besarme apasionadamente mientras me tocaba la verga por encima del pantalón, cuando le metí la mano por debajo de su vestido para tocar su vagina me di cuenta de dos cosas, uno, de que la tenía recién depiladita y muy húmeda, y dos, que la muy puta no traía ropa interior y le dije un poco serio…
Yo-. Cindy porque no traes nada abajo del vestido?
A lo que no hizo caso y siguió besándome…
Cindy-. Tu sígueme besando que tengo muchas ganas de que me cojas…
Muchas cosas pasaron por mi mente y no pude evitar insistir en la pregunta…
Yo.- Porque no traes nada Cindy? Te la quitaron? o así te fuiste a la fiesta?
Ella volvió a ignorarme y me saco la verga del pantalón y empezó a mamarmela, lo cual hizo que por el momento no le volviera a insistir, siguió mamando por un rato, lo hacía de una forma descomunal, típico de cuando tenía alcohol en la sangre, se convertía en toda una actriz porno, en un momento dado se acomodó, reclino mi asiento hacia atrás y se subió en mi verga, sus movimientos eran de toda una diosa, ella disfrutaba de tener la verga hasta el fondo y en un momento le dije…
Yo-. Oye más despacio o harás que me venga dentro de ti
Cindy-. Hoy quiero que me la llenes de leche mi amor, y me compras una pastilla del día siguiente, sí?
Yo solo asentí moviendo la cabeza, pero eso me hizo ponerme a pensar, quizá tu que está leyendo esto habrás pensado lo mismo que yo, aunque ya algunas veces que nos había ganado la calentura y habíamos cogido sin protección e incluso me había venido dentro de ella, habíamos usado esa pastilla como anticonceptivo para que no quedara embarazada, esta vez era mucha coincidencia y lo que paso por mi mente es que seguramente en la fiesta algún chico se la había cogido, por eso no traía ropa interior y muy seguramente se la cogió sin condón y muy seguramente le llenaron su hermosa vagina de semen, pensar en eso me éxito demasiado y ya no me pude contener y le deje ir toda una explosión de leche dentro de su panochita, cuando por fin termine ella ya solo hacia movimientos lentos en mi verga y un poco agitada me pregunto…
Cindy-. ¿Aun quieres saber porque no traigo ropa interior? Pero con una voz muy sensual y llena de lujuria…
A lo que solamente negué con la cabeza y comenzó a besarme, le dije, -. Eres una puta ¿sabías? y ella solo movió la cabeza diciéndome que sí, y volvió a besarme, y me dijo .- y a ti te encanta que sea toda una puta… a lo que solo moví la cabeza diciendo que si…
Obviamente se la habían cogido en esa fiesta, y tal vez mas de alguno, no lo sé, pero era adictiva esa sensación de tener como novia una chica así de puta, me uso para que le comprara la pastilla anticonceptiva por la cogida que algún otro chavo le había dado, esa vagina había recibido en tan solo unas horas la leche de por lo menos 2 vergas, de eso estaba seguro, sé que esa noche hizo realidad la fantasía de comerse más de una verga en un día, pues cuando la deje en su casa casi me lo confirmo.
Después de pasar a la farmacia por la pastilla la lleve a su casa y cuando se bajó del coche y cerro la puerta, se inclinó hacia la ventana para decirme adiós le pregunte sonriendo…
Yo. – ¿La tenía más grande que yo?
Sonrió y me contesto
Cindy. – tal vez…
Cuando llegue a casa fui directo a mi recamara y aunque ya había cogido, estaba completamente excitado nuevamente por lo que su respuesta provoco en mí y me masturbe imaginando como se habían cogido a mi novia y en que su historial de vergas diferentes había aumentado a 4 esa noche (yo, sus dos novios anteriores y ahora el afortunado de esta noche), historial que por supuesto iría incrementando con el tiempo.
A los dos días me contó lo sucedido, estábamos nuevamente en nuestro lugar secreto fuera de la ciudad, fuimos obviamente con la intención de coger nuevamente, pero esta vez al pedirle que me contara, aceptó sin problema…
La plática fue la siguiente, palabras más, palabras menos…
Cindy. – Después de un rato de que me dejaste en la fiesta llego el hermano de mi amiga Sara, es como un año menor que tú, se llama Ramiro, es guapo no lo niego, casi inmediatamente me di cuenta de que no dejaba de mirarme, creo que Sara le dijo que yo era su amiga pues después de que platico con ella un momento se acercó a mí con mucha confianza, me empezó a sacar platica, inmediatamente me di cuenta de que sus intenciones eran cogerme…
Yo. – Ni como culparlo amor, con la forma en la que ibas vestida cualquiera te hubiera querido coger…
Ella solo sonrió y continúo contándome…
Cindy. – me pregunto ¿que si tenía novio? Le dije que sí, pero al parecer no le importo pues empezó a alagar mi cuerpo…
Yo-. ¿Qué te dijo?
Cindy. – Pues me dijo que tenía unas piernas hermosas y que con ese vestido se me notaban unas nalgas riquísimas, que el que se comía todo eso era muy afortunado y pues inevitablemente le agradecí sus comentarios y pues ya me conoces amor, la verdad es que esas palabras me provocaron un poco de calor entre las piernas por el alcohol que ya había tomado hasta ese momento…
Yo. – Si ya sé que cuando tomas alcohol te vuelves más puta de lo normal, continua…
Cindy-. Creo que como vio que sus palabras no me molestaron o me incomodaron continúo haciéndome cumplidos así cada que podía y poco a poco aumentaba el tono de sus comentarios, me dijo que seguramente desnuda era todo un monumento y que llegando a casa se la jalaría pensado en mí, eso último fue lo que me puso realmente caliente amor…
(En ese momento Cindy me miro con una cara como pidiendo perdón, pero de antemano sé que, como ya les he contado, le encanta saber que es el motivo por el cual un hombre se masturba y de las explosiones de semen.)
Cindy. – No te voy a mentir, a partir de ese momento me puse muuuuy caliente, sentía mi vagina muy húmeda y empecé a fantasear con que Ramiro me metía su verga, solo no quería ser muy obvia…
(En este punto de la historia ya se me había puesto dura la verga de imaginar todo lo que me estaba contando, me la saque del pantalón para que Cindy continuara contándome mientras con su mano me la jalaba, así continuamos hablando…)
Yo. – ¿No te acordaste de mí en ese momento?
Cindy-. (con su carita de perdón nuevamente) si amor, pero también pensé que por todo lo que hemos fantaseado no tendrías problema en que me cogiera un ratito otro hombre, ¿o me equivoco?
(En ese momento tuve un montón de sentimientos encontrados, entre un poco de celos y excitación por el hecho de que mi novia pensaba en cogerse a otro, aunque muchas veces lo habíamos fantaseado, esto ya era diferente pues era real, no solo una fantasía, al final gano la excitación y mientras ella me seguía masturbando le dije…)
Yo. – Sabes bien que no mi amor, no tengo problema con eso siempre y cuando me cuentes, me des detalles y sobre todo no seas tan evidente para que después la gente no ande diciendo que eres toda una puta, ya sabes, que no se haga todo un chisme, tienes que seguir guardando siempre esa imagen de una mujer inalcanzable, continua…
Cindy.- Me invito a bailar y fue ahí donde sentí su bulto, se le había parado por la forma en la que bailábamos tan pegaditos y me di cuenta que chiquita no la tenía, Sara se dio cuenta de las intenciones de Ramiro por la forma en la que me tocaba y le reclamó, pero intervine y le dije a Sara que todo estaba bien que no lo regañara, y perdón amor pero no sé cómo me anime pero le dije al oído a Sara “me lo voy a coger”, ella no supo cómo reaccionar y solo riéndose y moviendo los labios me dijo “eres una puta”. Después de eso te juro que estaba completamente segura y deseosa de probar una verga diferente a la tuya esa noche y le dije a Ramiro también al oído, “quiero que me cojas”, a lo cual se quedó muy sorprendido…
Yo. – Como no iba a sorprenderse, seguramente nunca imagino que así de buenísima resultaras ser una zorra facilota que con solo cachondearte un poco le ibas abrir las piernas, pero que le vamos hacer amor, así eres de puta, así me encantas, así me vuelves loco, continua…
Cindy. – Amor no me digas esas cosas porque haces que me ponga muy caliente, bueno ya después él me preguntó “¿hablas en serio?” A lo que le respondí “¿Quieres o no? busca un lugar y deja de perder el tiempo o va a llegar mi novio por mí.”
(Al saber que le dijo eso al mismo tiempo que le pedía que se la cogiera, uuuff, por poco hace que me venga a chorros en las manos de Cindy pues no dejaba de jalármela mientras me seguía contando, tuve que detenerla y al darse cuenta que casi me hacer terminar esperó unos segundos y me la comenzó a chupar, después de un momento me pregunto si quería que me siguiera contando o que si ya quería metérsela, le conteste que por favor me siguiera contando…)
Cindy. – Para suerte de los dos arriba de la parte techada del salón de fiesta hay un pequeño departamento deshabitado, Ramiro subió a ver y regresó a decirme que se podía subir y entrar sin problema, así que de forma separada para que nadie se diera cuenta, primero él y luego yo subimos, Ramiro con su celular ilumino ya dentro del departamento y me llevo hasta el baño donde pudimos encerrarnos y encender la luz sin que nadie lo notara pues la ventana da hacia atrás, hubiera querido que me cogiera en la cama pero queríamos hacerlo con luz y la recamara da hacia el salón de fiesta, ya encerrados Ramiro me vio de arriba a abajo como saboreándome, me levante un poco el vestido y le dije “cógeme”, él se abalanzo hacia a mí con fuerza y me recargo contra la pared, me comenzó a besar y con su rodilla me separo las piernas y me comenzó a acariciar mi húmeda vagina con una mano mientras que con la otra me acariciaba las tetas, no opuse resistencia a nada y con una mano comencé a acariciar su pene por encima del pantalón, el cual ya se sentía como piedra, le desabroche el cinto, luego el pantalón y por fin tuve en mis manos esa verga que tanto deseaba, de tamaño es como la tuya pero si era mucho más gruesa amor, es impresionante lo ancho de esa verga, solo me decepciono que no estaba depilado, ya sabes que me encantan las vergas depiladas, comencé a masturbarlo y hubieras visto su cara de placer mientras se lo hacía, eso me excito aun mas, después de un rato se agacho, me quito la tanga y comenzó a lamer mi vagina, le puse una pierna en el hombro para facilitarle el trabajo, fue increíble esa sensación de un hombre diferente a ti haciéndome sexo oral…
(Ramiro era el segundo hombre que le hacía sexo oral, pues sus anteriores novios que si se la habían cogido nunca se lo hicieron, por lo menos en eso si fui el primero, o al menos eso me dijo jajaja.)
Cindy.- Después de un rato le pedí que se levantara y ahora yo me agache y comencé a chupársela y a jalársela al mismo tiempo, era tan grueso su pene que te juro que no me cabía en la boca, después de unos 3 o 4 minutos de estársela chupando por poco y se viene en mi boca, sabes que soy una experta haciéndolo, el me detuvo y me levanto, con fuerza me volvió a poner contra la pared pero ahora dándole la espalda, por la altura de mis tacones quede a una altura perfecta para él, me levanto el vestido, me puso su verga en mis nalgas, me la restregó de arriba abajo y de un lado a otro, me dio unas nalgadas con su verga dura, eso me encanto pero te juro que ese momento se me hizo eterno pues yo solo deseaba tener ya ese rico pene entrando y saliendo de mí, no paso mucho tiempo y de un solo golpe y con fuerza me la metió hasta el fondo, yo estaba tan húmeda y excitada que no fue difícil que ese trozote de carne me entrara con facilidad, me empezó a coger con movimientos lentos, luego un poco más rápido hasta comenzar a darme lo más duro que podía mientras me jalaba el cabello hacia atrás con una mano y con la otra me tenía tomada de la cintura, también me besaba el cuello, te juro que en ese momento me sentía toda una autentica puta amor, las más puta de mundo!! y eso me excitaba más y más, yo estaba completamente perdida en el placer que me hacía sentir que otro hombre me estuviera cogiendo, la verdad es que resulto que Ramiro sabe coger muy rico y más con ese pene tan grueso, nunca había tenido dentro de mi vagina algo tan ancho y no te voy a mentir eso me hizo sentir en el paraíso. En esa posición estuvimos 7 u 8 minutos y tuve mi primer orgasmo de la noche, luego me volteo, me puso de frente a él, me levanto una pierna y me la metió con fuerza, otra vez gracias a mis tacones me cogió sin problema así de pie, me besaba, me metía su lengua en mi boca, me decía que yo era su puta, sabes que eso me excita mucho y yo solo le pedía que me repitiera esas palabras una y otra vez…
(toda esta parte me la contó al oído con una voz suave y sexy mientras seguía masturbándome con una de sus manos, me esforzaba por no venirme pues toda la historia me tenía muy excitado, de vez en cuando se agachaba a chupármela un poco)
Yo. – sí que eres toda una puta mi amor… continua…
Cindy-. Lo detuve, me agache y me puse de perrito mostrándole todo mi culito y solo con la mirada le dije que me la metiera, se puso de rodillas detrás de mí, nuevamente jugueteo con su verga en mis nalgas, me dio unos golpecitos con su verga en mi vagina y uuuuffff, me la metió hasta el fondo otra vez, en esta posición la sentí aún más adentro, inmediatamente me comenzó a coger con fuerza, yo gritaba de placer y tuve mi segundo orgasmo aún más intenso que el primero, gracias a la música de la fiesta nadie me escuchaba, me cogió así por unos 10 minutos y me pregunto, ¿Dónde quieres mi leche?, a lo que solo le mostré la lengua pidiéndosela en la boca, pero el muy idiota no aguato y se vino dentro de mí, pero woooow, sentir lo caliente de su semen dentro de mí me encanto, cada cosa me hacía sentir más y más puta, después de que termino y aun si sacarme su verga se disculpó por no haberse aguantado, yo solo le sonreí, cuando me la saco me pidió que si podía tomarme una foto así empinadita como estaba a lo cual por la excitación accedí con la condición de que no se viera mi cara, la tomo y me la mostro, en la foto se veía como su semen comenzaba a escurrir fuera de mi vagina, así que con dos de mis dedos la recolecte todita, me lleve los dedos a la boca y me los lamí hasta comerme todo ese rico semen, el solo me veía con una cara de satisfacción y me dijo que era la mujer más increíble que conocía. Después de esto comenzamos a vestirnos y el tomo mi tanga con una mano, la empuño y se la llevo a la nariz para olerla y me dijo que si se podía quedar con ella como recuerdo, a lo cual no me pude negar amor, por eso no traía nada abajo ese día, de hecho, le dije, “ok, pero mastúrbate con ella muchas veces” lo siento amor, pero sabes lo que me encanta eso…
(nuevamente se agacho a chupármela un poco, yo solo imaginaba todo lo que me estaba contando, ahora ese tal Ramiro tiene una tanga y una foto de mi novia empinada y con su semen escurriendo de la vagina como trofeos, y no sé por qué pero saber eso me excito aun mas…)
Yo. – ¿Luego que más Paso?
Cindy. – Bajamos con cuidado a la fiesta sin que nadie se diera cuenta, tomamos unos tragos más y después de un rato llegaste por mi…
Yo. – ¿Y estás segura de que nadie se dio cuenta?
Cindy. – Bueno eso creo, Obviamente Sara si se dio cuenta, pero de ahí en más cada quien estaba en su rollo.
Yo. – ¿y porque no me quisiste decir ese mismo día lo que paso?
Cindy-. Amor comprende que tenía un poco de miedo del como ibas a reaccionar, pues aunque habíamos fantaseado con algo así, nunca había sucedió, ese día algo me paso que me gano la calentura, no supe como contarte inmediatamente, y pues como aún seguía muy caliente cuando me recogiste, por eso te pedí que viniéramos aquí para que ahora me cogieras tú, y así de paso supe lo que es coger con 2 hombres diferentes el mismo día, cumplí una de mis tantas y sucias fantasías.
(ya no soporté más y la hice que se montara en mí y comenzamos a coger, estaba tan excitado por toda la historia que me acababa de contar que no aguante más que unos 3 o 4 minutos, le pedí que se bajara y comenzó a chupármelo para hacerme terminar de esa manera y le di toda mi leche en su boquita)
Días después y aun toda esa historia en mi cabeza le dije…
Yo. – Oye amor, quiero que hagas algo
Cindy-. ¿Qué cosa?
Yo-. Quiero que te vuelvas a coger a Ramiro…
(Esto que le dije la dejo muy muy sorprendida, me miro con una cara de incredulidad, hasta con la boca abierta se quedó)
Cindy. – Júrame que hablas en serio…
Yo. – Te lo juro, he estado pensando y creo que, aunque esa cogida que te dio en el baño estuvo buena, sería mucho mejor si te coge en una cama, en un cuarto de hotel, donde puedas comerte esa verga en todas las posiciones que te encantan, no quiero que te quedes con las ganas de esa verga en una cama, así que quiero que de alguna forma lo contactes y lo orilles a que te pida ir a un hotel, solo que esta vez quiero evidencias, quiero fotos o videos de como se la chupas, de cómo te la mete hasta el fondo, de cómo disfrutas de esa verga con toda libertad…
(su cara de incredulidad cambio por una cara llena de lujuria)
Cindy. – hay amor por eso me encantas, porque sabes exactamente mis deseos y me los cumples, le pediré su número de teléfono a mi amiga Sara y yo encantada de volverme a comer ese rico pene que tiene…
Bueno esa ya será historia del siguiente relato, también les contare de cómo se cogió a su excompañero de prepa Santiago, aquel al que se le miraba un bulto enorme con uniforme de deportes, de cómo le cumplí su fantasía de una doble penetración con 2 vergas reales, también les contare de la cogida que le dio un chico de color gracias a mi a una semana de casarnos y muchas otras historias donde la puta de mi esposa disfruto de otras vergas…
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