Mi amigo Carlos es un comerciante, que viaja todas las semanas a diferentes puntos del país vendiendo repuestos de maquinas agrícolas, ase un año atrás se separo de su mujer la cual se fue del país con un camionero y el se quedo con los dos hijos Víctor de siete años y Sandra de 18 años.
Un día mi amigo vino a mi casa y me pidió un favor, el cual era de que en las dos noches siguientes pasara por su casa para ver como están los chicos, ya que el se iva de viaje por dos días, yo le conteste que viajara tranquilo que yo iva a andar por ahí.
A la noche siguiente fui a la casa de mi amigo, justo en el momento que el salía con la valija para el viaje, allí el me contó que la abuela havia venido a retirar al nieto menor y que solo Sandra quedaría en la casa, después de despedirlo en la estación de trenes yo y Sandra regresamos a su casa, la muchacha era muy linda tenia ojos verdes, unos glúteos bien cachetudos, atraves de la blusa se podía ver que sus tetas ya estaban en condiciones de ser lamidas, su cabellera era larga le llegaba hasta la cintura.
Cuando ingresamos en la casa ya era muy tarde, como las diez de la noche, ella se retiro a su dormitorio y yo me quede en la sala viendo un poco de televisión, una hora después yo ya quería irme a mi casa pero antes decidí pasar por el dormitorio de Sandrita, la puerta estaba entreabierta yo me asome si hacer ruido, como para espiar que estaba haciendo ella, de pronto vi que estaba completamente desnuda en la cama con un consolador o una especie de pene de goma, vi como ella se lo introducía en la vagina con gran gozo, también podía escuchar que tenia un televisor encendido donde estaban pasando películas pornográficas, mientras tanto mi Pene se volvía loco dentro de mi pantalón al ver semejante espectáculo, exigía entrar y participar en la fiesta, toque la puerta para ingresar en el dormitorio, ante mi asombro Sandrita me pidió que entrara, una vez adentro, ella se dio cuenta que mi pantalón a la altura del cierre estaba muy abultado y ella dijo â??veo que tu pija esta crecida, seguro que estuviste espiando, mi papa no me deja salir con mis amigos así que me divierto viendo televisiónâ? un minuto después ella abrió sus piernas y me dejo ver toda su vagina, su conchita que ya estaba muy humedecida, al costado de la cama estaba tirada su bombacha, me pidió que se la alcanzara, mientras tanto ella tenia clavada la mirada en la televisión donde estaban pasando la imagen de cómo una mujer chupaba un pene gigantesco, ella giro la cabeza y me pregunto â??vos la tenes así de grande, dejamela verâ? yo ni lerdo ni perezoso saque mi pene endurecido, ella lo tomo con sus dos manos y con un ojo en el televisor y el otro en mi tronco, se lo introdujo en la boca y empezó a succionarlo desesperadamente con pasión inaudita después de dos minutos largos ella se lo saco de la boca y me dijo â??tu pene es sabroso, solo lo quiero para mi, deseo que me hagas todas las cosas que le hacen a una mujer en una película pornográficaâ? yo le conteste que teníamos dos noches por delante, acto siguiente le introduje todo mi miembro viril en su boca, allí mi pene termino por alcanzar todo su tamaño, Sandrita de rato en rato chupaba con frenesí la punta de mi pija, después nos recostamos en la cama, allí pude hacer realidad mi sueño de chuparle los pezones que estaban duros, después baje con mi lengua por su cuerpo hasta llegar a su vagina donde introduje mi lengua y juguetee con su clítoris, ella desbordaba de alegría, cuando sentí que su calentura había llegado al clima máximo, le pedí que me entregara su culo ella me respondió â??vi que en las películas las chicas sufren cuando las penetran por el ano, mi culo es virgen, esta muy cerrado y es muy estrechoâ? yo le conteste que eso tenia solución, fui al baño a buscar algo que me ayudara a dilatar el culo de esta virgen, allí encontré en el botiquín un anestésico local que se utiliza para el dolor de muelas y que viene en gel, con el regrese al dormitorio, mientras tanto Sandrita veía atentamente como justamente en la televisión se hacia una penetración anal, nos fuimos a la cama allí yo le coloque el anestésico como crema alrededor de ano y empecé a introducir el consolador que ella tenia, el ano comenzó a dilatarse, para que ella estuviese concentrada en otra cosa, la puse a mirar el televisor mientras estaba agachada y arrodillada en la cama, coloque un video donde solo había penetraciones anales, para que fuera motivándose, a los diez minutos su culo estaba completamente abierto, inmediatamente le dije, Sandrita prepárate porque mi pene va a entrar en tu culito, y así mi tronco ingreso por ese ano estrecho y virgen, ella lanzo un quejido suave, podía sentir como su cola dura golpeaba contra mi, como pidiéndome mas y mas adentro, mientras tanto ya amanecía afuera en la ciudad, ella me pidió que quería sentarse sobre mi pija y allí montar con su culo sobre mi pene, mientras ella montaba con su ano ardiente yo jugaba con su abundante cabellera, después le pedí que se arrodillara en la cama para poder seguir culeandola, allí pude ver que su orificio anal ya se había acostumbrado a mi miembro, sentí que mi leche iva ya a rebalzar, entonces ella me dijo â??quiero ser una buena niña y tomar la leche como desayunoâ? yo no me hice de rogar, le pedí que abriera todo lo que pudiera la boca frente a mi pene y mi semen salio con un solo chorro en busca de su boca y ella saboreándolo lo consumió
El día ya había amanecido por completo y nos sorprendió desnudos en la cama a los dos, tanto a mi como a Sandra nos esperaba una segunda noche de pasión, lo cual es todo un desafió para los cuarenta años que yo tengo, pero así la vida es muy linda y hay que gozarla.
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