Me cogieron entre dos y senti muy rico!!!!

Hoy fue un día difícil?. Ya era de noche, salí de trabajar habiendo lidiado con mucha gente testaruda, floja, impertinente.

Lo único que tenía ganas era de acostarme en mi cama y ver la tele, cualquier programa, simplemente para matar el tiempo.

Así que fui a una tienda a comprar unos chocolates y una manzana roja, de esas de dulce, rica, jugosa. De pronto, pasé por una tienda donde vendían televisores, ya sabes donde hay muchas y todas en un mismo canal.

Entré a ver, simplemente por ver, por distraerme y sin querer me quedé mirando así nada más, sin poner mucha atención. Había una escena de amor, tierna, suave; sin embargo, se presentó otra escena más intensa, el galán, después de besar apasionadamente a la dama, le empezó a quitar la ropa, pero creí que pararía cuando ya casi no le quedaba nada. Sin embargo, siguió y siguió, hasta dejarla desnuda. Pensé que no se habían dado cuenta y habían dejado correr la película por error. Así que divertida, saqué mi manzana pensando el aprovechar el momento.

Empezaba a lamerla y saborear su dulce textura cuando la imagen empezó a mostrar al tipo de la tele, chupar los senos de la mujer y ella empezó a bajar su pantalón y dejó expuesta una larga, gruesa y deliciosa verga?. Cielos no había visto una así??

Vi todas las teles y en todas estaba la misma imagen, esa hermosa y gran verga. Con nerviosismo empecé a lamer con más intensidad mi manzana. Veía en todas las pantallas como él empezaba a acariciar todo el cuerpo de la mujer. Lamía sus senos mientras la acariciaba con sus manos, ss nalgas, su clítoris y ella tomaba su verga y sus huevos, luego empezó a bajar hasta su entrepierna y con más ganas pelaba su verga y sus manos acariciaban sus huevos, ohhh que escena tan caliente.

Para entonces no podía apartar mis ojos de las pantallas, en imagen grande, pequeños y muy grandes. Me percaté que estaba muy húmeda, claro cómo no iba a estarlo con tanto estímulo. Desee ser esa mujer de la pantalla, pero yo sólo estaba mirando después de un día muy cansado.

De repente alguien se puso atrás de mí. Me tomó suavemente por la cintura y pegó su cuerpo detrás mío. Yo estaba entre asustada y paralizada. No podía moverme, no tenía la más remota idea de quien estaba haciendo eso. Me dijo susurrándome al oído, no te asustes, solamente tengo las mismas ganas de cogerte, que tú tienes de que te cojan.

Volteé a ver y era tal vez el encargado, el gerente, el dueño no sé, pero yo seguía ahí sin moverme y muy húmeda. El metió sus manos entre mi pantalón y encontró mi entrepierna, notó que estaba chorreando de deseo e inmediatamente desabrocho mi blusa, el pantalón y lo bajó. El seguía detrás mío. En eso sentí como abría su cierre y liberaba una grandiosa verga y la pegó en mis nalgas, yo podía sentir su tamaño, era tibia y muy mojada, estaba soltando sus jugos. Yo no podía moverme, le dije que no podíamos estar ahí así. Me dijo que ya toda la tienda estaba cerrada y que el dueño de la verga que me había hipnotizado era él. Entonces mi excitación se fue a las alturas, yo miraba las escenas y al mismo tiempo sentía su poderosa verga como empezaba a buscar mi intimidad. El seguí detrás mío era increíble la maestría con que me acariciaba y sin darme cuenta empezó su verga a encontrar el camino?. Empezó a abrirse paso entre mis piernas y penetrar, a abrirme? era un inmenso placer sumado a lo que tenía frente a mis ojos. Él no quería que dejara de ver las imágenes de como cogían los que estaban en la tele, en todas las teles, en todas se veían las posiciones que tomaban los actores, ella mamándolo, el también, la cogía por atrás, y luego la ponía en cuatro y la embestía por atrás. Recordé que tenía mi manzana, mi dulce manzana. Él me dijo que en lugar de lamerla, le lamiera su verga, me volteó y baje hasta sus piernas y pude constatar que efectivamente era la misma verga que la que había en la tele, pero totalmente real, me apoderé de ella entre mis manos, mi boca empezó a acariciarla con mi lengua, y la metí lo más que podía, porque era muy grande, hubiera querido que me cupiera toda, pero era demasiado grande y gruesa, pero yo la disfrutaba mucho y él también. Oía sus gritos de placer al sentir como se la pelaba y se la mamaba. Yo estaba totalmente a su merced, no podía escapar ni quería, solo deseaba esa verga con todo mi cuerpo que exigía ser cogida, por él. Y entonces caímos a la alfombra se puso encima de mí, tomo mis manos y con sus piernas abrió las mías, estaba totalmente indefensa ante ese macho, viril, potente encima de mí. Y como esperaba y deseaba, me penetró suavemente y me decía ?sientes como te estoy abriendo?? siente mi verga que está entrando hasta el fondo de ti. Eres mía, solo mía y solo yo puedo cogerte así, siente que solo yo puedo meter mi verga en ti. Nadie más puede cogerte, y yo mansamente me sentía sometida totalmente a él.

No sé cuántas veces me cogió, me ponía encima de él., por atrás, en cuatro, ?. Todo el tiempo que quiso, cuanto quiso, y yo solamente obedecía y dejaba que su verga deliciosa me poseyera, de repente vinieron uno, dos, tres, orgasmos y sentía que él ya no aguantaba y me dijo que era la puta más rica que había tenido y que era suya y que ya no aguantaba venirse, quería dejarme llena toda de su semen, que ya era yo de su propiedad solamente de él para cuando quisiera cogerme, lo haría cuantas veces quisiera, yo no podía decir nada, pero mi cuerpo estaba totalmente de acuerdo. Lo recibía con placer. Así que estando dentro se vino una y otra vez, no sabía cuándo iba a dejar de salirle toda su leche tibia, salía mucha, tanta que se vino adentro, luego la sacó y se vino en mi cara y senos? salía mucha así que alcanzo a llenarme toda.

Después se levantó y me dio mi manzana y me dijo, puedes lamerla mientras no estés conmigo, pero seguiré cogiéndote muchas veces. Aquí te esperaré?.. todas las noches?..