Rebeca y Don Gastón una pareja de infieles a rabiar
Me llamo Rebeca, tengo 36 años y esto que les cuento ocurrió hace ocho. Mi suegra trabajó por muchos años como doméstica en una casa de gente adinerada. Ella recibió una buena paga y siempre se mostró agradecida con los que fueron sus patrones. Cuando terminó su actividad, por enfermedad, quien había sido su patrón …