Fiesta en el lago, mi prima y sus amiga
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Eran las vacaciones de verano y como otros veranos, iba al pueblo de mi abuela a pasar las vacaciones. Por aquel entonces yo tenía 19 años y recién me había sacado el carnet de conducir y comprado mi primer coche.
Era Sábado y había quedado con mis amigos para ir al lago a pasar la tarde. Fuimos en varios coches, pues eramos 12 personas entre amigos y amigos de amigos.
Después de unas horas en el lago, apareció mi prima con sus amigas. Como en nuestra pandilla había amigos o familiares de las chicas, se unieron a nosotros y terminamos la tarde todos juntos. Chapoteábamos en el agua, con juegos y algún que otro acercamiento de los chicos hacia las chicas. Yo, por mi parte, me acercaba a mi prima y la tocaba por todos lados, disimuladamente, y ella a mí.
En un descuido de la pandilla, nos alejamos y escondimos entre unas piedras que había en un rincón del lago, lejos de miradas indiscretas. Una vez nos aseguramos de que no nos vería nadie, comenzamos a besarnos y a toquetearnos con descaro. Yo masajeaba sus deliciosas tetas (.)(.), mientras ella jugaba con sus manos en mi polla, 8===>. Llenos de deseo, el uno por el otro, nos desnudamos y nos tumbamos sobre las piedras. Mientras yo le comía su coño (Y), ella hacía lo propio con mi polla en un delicioso 69.
Dejándola en la misma postura, es decir boca arriba, me coloqué entre sus piernas y la empecé a penetrar lentamente por su coño, mientras chupaba y mamaba de sus pezones. Yo bombeaba lentamente mientras ella no paraba de gemir y tener un orgasmo tras otro, antes de que yo le inundara su coño con mi lefa.
No nos dimos cuenta de que unos metros más allá, estaba uno de mis amigos con una de sus amigas. Nos volvimos a calentar viendo como follaban. Cuando terminaron, nos vieron y en vez de esconderse se acercaron a nosotros. Los cuatro estábamos desnudos, y al ver el cuerpo de la chica, mi polla empezó a reaccionar, ante la mirada de ella.
Mi prima y yo nos hicimos una seña, y comenzó a seducir a mi amigo, dejándome a solas con la chica. Después de hablar un rato, comencé a acariciarla suavemente, y le besaba el cuello. Ella se dejaba hacer, mientras jugaba con mi dedo anular en su coño y ella con su mano en mi polla. No hizo falta más, la coloqué de perrito y le inserté el coño suavemente, mientras jugaba con mis manos en sus tetas. Después de un buen rato, nos corrimos los dos a la vez. Yo, inundando su coño con mi lefa y ella mojando mi polla con sus jugos.
Después de vestirnos, nos reunimos los cuatro con el resto de amistades, los cuales por sus caras, se habían dado cuenta de lo nuestro, aunque se notaba que ellos no habían perdido el tiempo tampoco. Nos montamos en los coches, aunque esta vez mi prima se vino en el mio.
Una vez dejé a mis amigos en sus casas, continuamos hacia la nuestra, haciendo un alto en el camino, para mamarme la polla y llenarle la boca con mi corrida, mientras ella hacía lo propio con sus jugos en la mía.
Una vez en casa, nos duchamos y fuimos a pasear con mis tíos. Nos cruzamos con los amigos del intercambio, con un gesto cómplice. Al llegar a casa, salimos al patio a fumar un cigarro y darnos unos besos a escondidas, mientras nos toqueteábamos.
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