Dejé que mi amigo se coja a mi novia

Todo empezó una noche que estaba bebiendo alcohol con mi novia en mi casa, ella tenía un vestido puesto, se veía muy provocativa, despertó todos mis fetiches con solo verla, ya íbamos un par de horas bebiendo, ya mi novia estaba un poco ebria, por momentos nos tocábamos, también sexo oral, pero seguíamos bebiendo (ya teníamos años de relación, recalco que yo ya tenía este plan en mente, siempre había tenido morbo por ver a mi pareja teniendo relaciones con otra persona).

Seguíamos bebiendo mientras yo le escribía a un amigo que vaya a mi casa para beber unos tragos que estaba yo y mi novia (mi novia no sabía que un amigo iría a casa a beber con nosotros). Mi amigo dijo que en 40 minutos llegaba, en el lapso de esos 40 minutos seguimos bebiendo y haciendo sexo oral con mi novia, ella ya estaba un poco más ebria que al principio, y ya habían pasado esos 40 minutos, mi amigo me mandó un mensaje diciendo que ya estaba afuera de la casa, que vaya a abrir la puerta, pero yo, antes de ir a abrirle la puerta a mi amigo, le dije a mi novia que vamos al cuarto que tendríamos sexo, (recalco otra vez que ella no sabía que iría un amigo a casa).

Fuimos al cuarto con mi novia, ella ya estaba muy prendida, me hablaba a la cama para que la penetre. Yo levanté su vestido, saqué sus bragas, la toqué un poco y le dije que me esperara en la cama, que iría a la cocina a beber agua y volvía. Ella quedó recostada en la cama, estaban las luces apagadas y la música estaba alta, fui a abrirle la puerta a mi amigo, lo saludé en la sala y le dije, así, directamente, le di un preservativo y le dije: con, entra al cuarto y fóllate a mi novia. El me miró incrédulo, me dijo: ¿cómo así?, le dije en serio, ella está ebria y con las luces apagadas no se dará cuenta que no soy yo, y sin pensarlo dijo: ya. Que en qué cuarto está ella, lo llevé hasta la puerta del cuarto y entró, yo me quedé, obviamente, afuera de la puerta del cuarto.

No pasaron ni 40 segundos de lo que entró al cuarto y se empezaron a escuchar los gemidos de mi novia, cada vez gemía más fuerte, no pude evitar entre abrir un poco la puerta del cuarto y observar, solo se veían las sombras, aparentemente ella estaba abierta de piernas y mi amigo entre sus piernas penetrándola y sujetando sus manos a la vez, era algo indescriptible lo que sentía, una mezcla de placer y celos, mi novia seguía gimiendo y gritando «hay que rico», obviamente para mi amigo era carne nueva, la estaba penetrando fuerte y con ganas, no paraba de gritar «hay que rico» y escuché que dijo métemela por la cola, yo me quedé atónito escuchando, era obvio que él iba a aprovechar su oportunidad y la penetraría por detrás, en un momento escuché «hay que rico, ya me está gustando», yo moría de celos, pero seguía escuchando.

Por momentos la escuchaba gemir con desesperación y por momentos gritar. Yo me estaba masturbando mientras escuchaba. En un momento se escuchó un silencio. Él ya terminó y salió del cuarto y fue a la sala. Yo entré al cuarto y le dije a mi novia: Te gustó cómo te cogí. Ella respondió: Me encantó, estuvo rico. Toqué su vagina, estaba súper mojada, aparentemente ella se había venido.

Yo estaba a tope de la calentura, la tiré a la cama y me la cogí también con mucho deseo y más ganas que nunca. Luego le dije que se acueste a dormir. Se acostó y quedó en el cuarto. Yo salí a la sala, hablamos de lo sucedido con mi amigo y seguimos bebiendo hasta que se hizo de madrugada. Él dijo: Ya me tengo que ir. Le dije: Cógete otra vez y después te vas. Él no se, hizo de rogar y dijo que sí, yo entré al cuarto primero y vi que ella estaba dormida, salí a la sala, le dije a mi amigo: ella está dormida, anda, despertarla y cógetela, y así lo hizo, entró, la despertó.

Rápidamente empecé a escuchar gemidos. Yo estaba en la sala y volví a entre abrir la puerta para verlos, no me había percatado que estaba amaneciendo ya porque ya no se veían solo las sombras, se veía casi todo, él la tenía en cuatro y pisándole la nuca, se escuchaba como rebotaban las nalgas de mi novia, la tomaba por la cintura y la envestía fuertemente. Escuchaba a mi novia decir «para, ya no quiero más».

Aparentemente volvió a venirse nuevamente, ella le seguía repitiendo que pare, pero seguía disfrutando, entonces él igual siguió penetrándola hasta que terminó, no fue mucho, unos 7 minutos, fue astuto, puso las sábanas por encima de ellos dos y él salió rápidamente y la dejó bajo las sábanas, y entré yo, así ella no se dio cuenta que fue otro el que la penetró.

El ya se iba para su casa, quedé yo con mi novia cogiendo. Al otro día ella no se acordaba de nada, y obviamente yo tampoco. Le he mencionado lo que pasó aquella vez, actualmente seguimos de novios y cada que recuerdo esa noche y me acuerdo de ella ensartada por otro, me masturbo.

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