Compartiendo a mi mujer por segunda vez

La segunda vez que incluimos a alguien en nuestra relación fue algo delicioso.

Resulta que habían pasado casi 3 meses desde el día que había compartido a mi pareja con otro y yo había quedado encantado. Nuestro sexo se había vuelto más intenso y lo hacíamos más veces de las que estábamos acostumbrados. Un día sábado salimos a dar una vuelta y compramos un par de bebidas y estuvimos departiendo los dos durante toda la tarde. Como a eso de las 7 de la noche llegamos a nuestra casa con un deseo desbordante de sexo y comenzamos a coger delicioso, ella estaba boca abajo con un hilo negro, les recuerdo que ella tiene un culo blanco y grande que se ve delicioso con ropa y mucho más si ropa.

Yo, solo le hice el hilo a un lago y la comencé a coger con mucho deseo, en eso se me vino a la mente la experiencia que habíamos tenido hace algún tiempo con esa persona que la había hecho disfrutar tanto y sin pensarlo le dije “que rica estás, me encantaría que hubiera alguien más aquí con nosotros para hacerte disfrutar más” solo acabé de decir esas palabras cuando ella me dijo ¿quién mas? Y yo le dije, el mismo que te cogio frente a mi. Yo, sentí como inmediatamente su deseo se multiplicó y, yo le dije, pero si no quieres no hay problema y ella se apresuró a decir; ya me lo metí en la mente y quiero vivirlo.

Entonces le dije: escríbele que esperas, e inmediatamente le escribió si estaba disponible y él imaginando lo que significaba le dijo que si. Así que ella se puso un vestido negro corto que le hacía ver la punta de las nalgas y le quedaba delicioso con esas piernas hermosas que tiene. Salimos a recogerlo a él y pasamos comprando más bebida, cuando me baje del vehículo a comprar y mientras esperaba alcancé a ver a través del vidrio del carro que ella se había girado y se estaban besando, eso me volvió loco.

Cuando llegue al carro ella me dijo “mira el me estuvo besando, yo creo que ya no se aguanta, me voy a pasar al asiento de atrás”. A mi me excitaba jugar esa situación. Llegamos al motel y al principio todo parecía tímido entonces tomé la iniciativa y mientras ella estaba recostaba sobre la cama yo deslicé su vestido hacia arriba, dejando al aire su enorme y hermoso trasero al descubierto, donde solo asomaba levemente el hilo negro que apenas la cubría.

El inmediatamente se acerco y comenzó a acariciarle el trasero como si lo hubiera deseado por mucho tiempo. Inmediatamente ella me saco mi pene y el de él y comenzó a chupar los dos al mismo tiempo, después de un rato yo me acosté sobre la cama y ella y se subió sobre mi  y se metió mi pene por la vagina. Yo, le estrujaba las nalgas y al mismo tiempo se las abría dejándole el espacio libre a él para que se lo metiera por el culo pero él no lo hacía, hasta que de repente ella le gritó rómpeme  el culo que estás esperando.

Y él inmediatamente sin lubricación se la dejó ir por el culo mientras ella dio un grito de dolor y placer que no puedo explicar. Estuvimos dándole por unos 20 minutos hasta que ella se vino con un gemido muy fuerte que denotaba que lo había disfrutando intensamente, nosotros por nuestro lado hicimos lo nuestro y la llenamos completamente de leche.

Fue una noche exquisita cumplimos nuestro deseo y el suertudo le follo el enorme culo a ella hasta llenárselo de leche.

Luego de eso tuvimos un último encuentro con él y un amigo de él que pronto les relataré.

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Duzgan900
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