Alejandra Una Madura tragona de verga
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Para empezar diré que soy una persona muy pero en verdad muy caliente, con un temperamento fuerte y a la hora de coger soy muy dominante, pero antes que nada soy todo un CABALLERO que si la situación lo permite saco la bestia sexual que llevo dentro, y resulta que en una ocasión, en una conferencia de mi trabajo, me mandaron a la ciudad de México para participar en ella (soy de la cd de Guadalajara Jal. Mex. y trabajo como coordinador de Consultoria para hotelería aquí en GDL.) y pues resulta que ahí conocí a Alejandra, una dama madura 47 años, tés blanca, cabello negro azabache, el cual resaltaba muy bien sus facciones, boca grande labios carnosos, cintura pequeña un trasero bastante frondoso al igual que sus piernas, senos no muy grandes, lo suficiente para llenar un brasiere talla 36-b, pero unas piernas firmes, macizas, delineadas, que a pesar de su edad y para asombro de algunas jovencitas lucían maravillosas.
Pues en esa ocasión, Alejandra lucia en traje sastre color marrón, con un medio color humo donde la falda de su traje permitía verlas, unos 20 cts. Arriba de sus rodillas, unas zapatillas negras descubiertas del talón, resaltaba muy bien sus pantorrillas.
Ella era la directora de ventas de una reconocida marca de pastelillos que todo mundo conocemos, y en esa ocasión estaba encargada de las relaciones publicas y en dar a conocer el mercado que había logrado estableces todo el norte de la republica.
A mi en lo particular me había tocado dar a conocer el potencial de la zona noreste de la republica (la península de B.C.S.) que ofrece al turismo internacional como nacional, en cuanto a materia hotelera se refiere.
Poco después de la conferencia y ya en espacio de esparcimiento, nos toco conocernos mas afondo, en el bar del hotel donde ella me platicaba de lo que se encargaba y cuales eran sus labores a cumplir en la empresa, además de comentarme que tenia ya 1 año de divorciada y que vivía feliz su vida de soltería, con una hija de 17 años, y que su domicilio lo frecuentaba unos tres días a la semana debido a sus constantes viajes al noreste de la republica, estuvimos bebiendo algunos martinies, y al calor de tercero me comento que se sentía un poco mareada por lo que decidimos ir a tomar un poco de aire fresco.
Momento en el cual aproveché para alagarla y decirle lo excitante y rica que se veía con su traje sastre y lo hermoso y delicioso que me parecían sus piernas.
-En verdad te parecen..?
-No solo eso, toda tu estas deliciosa princesa.
Tome su mano adornada con un anillo de plata y sus uñas naturales color carmín, y dándole un beso en el contorno de su mano, pude aspirar la esencia de su perfume. Al sentir esto note su rostro un poco entre excitada y alagada a la vez.
-Sabes, me dijo, Se nota que que eres un poco salvaje a la hora del sexo, apersar de ser un caballero puedo adivinar en tu mirada lujuriosa.
-Pues no te equivocas, soy todo un caballero, pero en la cama soy un semental y si la situación lo permite puedo ser muy dominante a la hora de coger.
-Pues eso tendría que averiguarlo.
-Pues tu decides princesa, mi habitación o la tuya??
Vamos mejor a la tuya, yo estoy a un lado de mi jefe (director de ventas nacionales de la empresa)
-No se diga mas, estoy en la 3003, toma la llave, sube y en un momento estoy contigo
Le dije, para librarnos de toda sospecha y destantear al enemigo.
15 minutos después llegue a mi habitación y al entrar pude percibir el aroma de su perfume, y ella sentada con las piernas cruzadas luciendo un baby-dall transparente color tinto, unas zapatillas blancas con peluche en los deditos y el pelo suelto cubriendo un poco su hermoso rostro.
Waooo, dije al momento de verla.
-Cosita hermosa, nadamas de verte así, mi verga esta lastimándome de tan dura y gruesa.
-Le dije señalando mi entrepierna.
-Se nota que estas como me gustan papi, bien armados. Déjame liberarlo y saborearlo que bastante falta me hace.
Dijo refiriéndose a los mas de 3 semanas que tenia sin sexo, me acerque ella, me pare abriendo ligeramente mis piernas, quitándome el saco y desamarrando mi corbata que ya me estorbaba para la acción.
Tomo mi paquete apretándolo por enzima de mi pantalón al mismo tiempo bajaba el sierra y desabrochando mi cinturón, lo abrió y saco del bóxer, liberando mi poste sexual que al mismo tiempo se balanceaba de arriba abajo. -Mmmhhhh, que delicia de camote, el grosor es lo más delicioso.
Tomándolo de la circunferencia abarcándolo con sus manitas, resaltando las venas y puñeteandolo a la misma vez. Después incorporo la segunda mano alrededor del trozo de carne, provocando que la cabeza de mi verga resaltara y brillara cual ciruela con babilla pre-eyaculatoria saliendo del ojo, lo lamio y dijo al paladear la babita.
-Que delicia de carne de macho, ahora si papa, vas a ver de lo que es capaz esta ?princesa? tuya.
Y en un repentino movimiento, abrió al máximo su boquita y sacando su roja lengua tratando de tragar la mayor cantidad de carne posible, desencajando así las facciones de su rostro, y engullendo mi poste sexual.
-ufff, eso princesa, toda esta carne es tuya mami, sopesa, acaricia y palpa también mis huevos.
Al momento de engullir mi verga, con una mano jugaba los huevos mientras que con la otra, sostenía mi gruesa verga para tratar de meter en su boquita la mayor cantidad de carne posible. Saco mi verga totalmente de su boca, jalando aire mientras hilillos de baba y jugos pre-eyaculatorio colgaban de sus labios y lengua, volvió su mirada hacia arriba diciéndome.
-Que deliciosa verga tienes cabron, este pedazo de carne tendrás que dármelo mas seguido.
Las veces que tu me la pidas princesa, dije con las manos en la cintura y sacando el bientra para que degustara en su totalidad de cilindro vergal.
-Tómalo mi princesa, comételo, engúllelo hasta donde seas capaz, que no ves que este poste sexual es todo para ti.
Ella sin dejar de jalarlo desde la base hasta el hongo hinchado de mi roja cabeza, jalo aire, abrió al máximo su boquita, y sacando esta vez la lengua lo engullo hasta donde la capacidad de su garganta le permitió, envolviendo el grosor y longitud de verga hasta un poco mas de la mitad, forzando a su vez su cuello para tragar lo máximo, logrando con esto tragarse mas de ¾ de gruesa verga, brotando unas lagrimitas de sus bellos ojos producto del esfuerzo al estirar su garganta creo yo.
Al sacar el vergajo de su garganta y boquita, logró sacar aire, colgándole nueva mente ebras de mis jugos mesclados con su saliva, pero en esta ocasión mas abundante.
Esto provocó que se me antojara probar y beber de su boca la mescla de tan excitante coctel. Tomándola de la nuca y a su vez de la barbilla, pegue mis labios a su entreabierta boca, degustando los jugos que de su lengua y garganta emanaba.
–Estas deliciosa mi niña, creo que ya fue suficiente sexo oral, dejemos que nuestro instinto animal se encargue de esto.
Le dije tomándola de sus manitas y poniéndola de pie, fui besando su cuello, muy tiernamente, diciéndole lo excitado y caliente que me sentía, lamiendo cada milímetro de su blanca piel, fui bajando por su espalda, luego por el lado de enfrente, haciendo a un lado su batita, me apodere de sus tetas turgentes y de pezones color café claro, duros como piedras los lamí y chupe como niño recién nacido, los mordí suavemente mientras mi princesa se revolvía de placer.
–Ufff, no mames Ricardo que rico cabron?ya deja de torturarme y ensártame de una buena vez, que no ves que mi gruta sexual esta hecha un rio de jugos.
Al escuchar esto, mi cerebro sintió pulsaciones que al mismo tiempo retumbaban en toda la extensión de mi verga, poniéndola como el acero, y al mismo tiempo mis glándulas salivales aflojaron gran cantidad de jugo, como si se tratara de un manjar a la vista.
Sin tardar pase mi mano por entre sus piernas y con el canto de mis tres dedos pude comprobar que en verdad estaba echa una sopa, pues la rendija de su bikini estaba empapada y a su vez los castaños bellos de su gruta estaban lacios de empapados, no hice mas que beber aquel licor que estimulaba en mi sensaciones de antojo anticipado, rápido le ordene.
–No mames Alejandra, te estas desasiendo en jugos, ponte a gatas y abre tus nalgas con tus manitas mami, porque ya quiero rellenarte de verga?!
Al hacerlo, no hubo otra imagen mas que le de ella empinada, sus protuberantes nalgas partidas enseñando un hoyo apretadito color café y el interior de sus labios vaginales rojos y babeantes al alcance de mi vista, a lo cual procedí a lamerle de arriba a bajo sin cesar, como si de ella dependiera mi alimento, metiendo lo mas profundo posible mi lengua, saboreando esa raja deliciosa, y a su vez metiéndola también en su apretado ano, como si mi alimento estuviera ahí.
–Ufff, ya papa, ya mi bebe, ya por favor te lo suplico? ensártame, lléname de verga, quiero que topes en mi útero por favor?.!!!
Al momento de sus palabras, y la estimulación del hipotálamo en mi cerebro, ella empezó a convulsionarse y a dejar salir chorros de una especie como de atole cristalino por su la hendidura de su pucha, el cual me dedique a recibir con mi boca abierta, tenia un sabor agridulce, pero lo mas excitante fue la abundancia y lo fuerte que salió de su pucha.
–No mames mi putita, ahora si llegue al máximo de excitación, anda jálate las nalgas con tus manos y estíralas lo mas que puedas porque no quiero obstáculo alguno para la cabeza de mi verga.
Al hacerlo, tome mi verga de la base, la apunte en la entrada de su pucha y pude ver y sentir como se estiraban sus labios para dar paso al grosor de mi tolete, dejándoselo hundir hasta topar con su útero y dejarlo ahí por un momento, sintiendo como se cimbro por la violenta arremetida. La tome por el talle de su breve cintura, abarcándola casi por completo con mis manos, para empezar un vaivén fuerte donde mi verga era cobijada por todo el interior de su pucha, sintiéndose calientita por dentro, y a su vez extremadamente mojado, donde en cada empellón salpicaba hasta mi rostro los jugos de ella, producto de las fuertes embestidas que le daba y mis huevos al estrellarse con su clítoris. Después de un buen rato donde mi verga topaba con su matriz debido a los violentas arremetidas, ella misma frotaba su clítoris desesperada, y a su vez brotaba de gruta sexual el mismo liquido bañándome por completo, verga huevos y muslos, al momento de sentir el liquido en mis partes, acelere
las arremetidas mientras ella daba alaridos de satisfacción mesclados con gritos ahogados como si se tratara de un parto o algo similar?
–Estas bien Ale??
–SI, no pares de retacarme verga?no pares cabron?!
En ese momento mi excitación me mando a un estado como de inconsciente, y seguí dando arremetidas, pero lo que vi fue algo fuera de la realidad, al menos para mí.
Ella temblando de todo el cuerpo, seguía convulsionándose mientras de su pucha salían chorros pero ahora si de meados amarillos, bañando las sabanas y mojando mis huevos y vientre, entonces le pregunte otra vez.
–Estas bien Ale?? A lo que ella respondió.
Rápido, mete tu verga en mi ano, la necesito ya?!
Saque mi verga de su pucha, soltando esta una gran cantidad como de aceite de cocina mescla de su venida, mis jugos y sus meados calientes.
Apunte mi verga aceitada y dura como un pepino y se lo apunte al ojete anal, pensando en que la hiva a lastimar pero grande fue mi sorpresa cuando, se le fue hasta la mitad sin ningún problema, luego ella misma se empujaba hacia atrás sin dejar de frotar su clítoris violentamente y con una temblorina de excitación me dijo.
Anda papi, empálame toda tu verga en mi recto, la necesito ahí por favor.
Ondas en sus carnosas nalgas se formaban debido a las violentas arremetidas que ella sola se daba y produciendo sonóros aplausos producto del choque de sus nalgas con mis muslos, asombrado seguí dándole andanadas profundas tomándola por sus hombros, mientras ella seguía fuera de si y su pucha producía chorros de meados calientes, a los que ella misma cuchareaba con su mano y los levaba a su boca, tragándolos como si se tratara agua de un manantial. Mientras yo excitadísimo por lo que estaba ocurriendo, lo que siguió rebaso el limite de lo que nunca había visto y por supuesto sentido, sentí una presión en la punta de mi verga, como si un pistón empujara la cabeza de mi verga, tratando de impedir el paso hacia las profundidades de su ano, a lo que ella me dijo.
–Ya, ya viene papi, sácame tu verga, sácala rápido?!
Fui sacando mi verga de lo profundo de su ano, sintiendo como era empujada, y que al salir, salió manchada toda la cabeza de un color café, su ano quedo ormado en circunferencia formando una O, y enseguida una barra de mierda salió después, a lo que mi instinto me ordeno recogerla sobre lo largo de mi verga como si se tratara de pasta dental depositada sobre el cepillo de dientes, fue entonces cuando ella me exigió.
Ven papa, dame eso que que recogiste en tu verga, dámelo?!Se volteó, y así empinada a gatas, abrió al máximo su boca, mostrando su rotso desarticulado y sus pupilas dilatas, producto de una excitación fuera de orbita.
No podía creer que esta princesa, con modales refinados y clase alta, se estuviera tragando mi verga con un aderezo de su propia ese fecal lo tragaba y degustaba junto con mi chorizo como si se tratara de un hot-dog aderezado, lo comía hasta la garganta tratando de engullirlo al máximo, y lo paladeaba como la mas dulce jalea o mantequilla de maní.
Yo mirando excitado y un poco sacado de onda, permanecía con mi verga erecta como el acero y as su vez excitado al máximo como ella tragaba mi verga y la pasta que a ella acompañaba, después de dejármela limpia por completo, no pude contener lo inevitable y jalándomela violentamente con su boca abierta, la lengua de fuera y yo tomándola de su rostro enrojecido por la excitación le dije.
–Abre bien la boca princesa porque ahora te voy a dar mi crema.
Acto seguido, borbotones de espesa y blanca leche salieron disparados directo al rostro de mi linda princesa, tomándolos ella con desesperación como si se tratara de un elixir vital, jalándomela con mas vigor solté 9 chorrazos que quedaron estrellados en su cara, ojos, mentón y cachetes, además del interior de su boquita, arrastrándolos con mi verga se los daba a tomar y ella gustosa los degustaba. Pensé que había sido el final pero ella enseguida me dijo?
–Espera, falta que me des mi agüita amarilla.
Refiriéndose a que quería que le diera unos chorros de meados, a lo que yo caliente y aun con fuerza en mis piernas solté un chorro débil de meados calientes y amarillos, lo que ella bebía y a su vez se desbordaban por las comisuras de sus labios.
Esto se me antojo probarlo de su boca, a lo que acto seguido pegue mi boca entreabierta a la de Alejandra para beber su saliva, y un poco de meados que en mescla me supieron a gloria.
Ya recuperados y recostados en la cama, me explico el gusto de esta fantasía, nació desde que era una adolecente, y que cuando se masturbaba frente a un espejo, la excitación la llevaba a mearse y cagarse y que por curiosidad probar estos residuos y que no con cualquiera practica, explicándome que este deseo sale únicamente con la persona indicada, aquel que logra excitarla al punto donde ella se desinhibe. Soy un caballero (léase C-A-B-A-L-L-E-R-O-), en toda la extensión de la palabra, con mucha imaginación, muy caliente, de 35 años, mido 1.72cms, soy de tez clara, cabello castaño lacio, ojos cafés, buen cuerpo, con un miembro de 8 pulg (22cms), duro y grueso, pero lo que en verdad importa es la habilidad para saber usarlo (mi mas humilde opinión),
Pueden contactarme damas de Guadalajara y alrededores.
Ricardo. ric.doza.chihuas (arroba) hotmailpuntocom