Una noche bastante cabreado conmigo y mi mente porno
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Vivo en la maravillosa isla de Tenerife desde hace 2 años, y después de que me sangraron con un alquiler abusivo 1 año, pude por fin encontrar una casita económica que compré aunque hubo que hacer arreglos. Está en un barrio llamado Barrio Nuevo de la capital, Santa Cruz, (digo para los que conozcan la zona y vean que no estoy de coña), desde donde se divisa toda la ciudad, y más desde mi calle, que está en lo más alto.
Pues bien, en los arreglos, me ayudó un amigo, el cual cuando vino por primera vez al sitio, comentó: “Joder, colega, vaya vista la que tienes desde aquí… “, claro que no fue la única persona que lo dijo, y es bastante cierto.
Estando un día terminando un curro con el, mirando por una de las recién puestas ventanas de la parte alta, me dijo “Coño!!!, ¿Ya verás bien a las vecinas, no?” y yo le respondí que no, que llegando a casa de noche lo único que me apetecía era dormir y ver un poco la tele, y además que las vecinas de allí eran todas mas bien viejorras, cosa que luego comprobé que no era cierto.
Un viernes, al no trabajar por la tarde, me quedé mirando por la ventana y pensando en lo que Fran me había dicho… ¿Y si había vecinas?, Me pasé un par de horas mirando las luces encendidas hasta donde me alcanzaba la vista para llegar a la conclusión de que estaba yo gilipollas… ¿Qué coño iba a ver yo alguna tía en bolas? ¡Que mente tan caliente tengo!. Pero al día siguiente, en el Carrefour, me fijé en unos prismáticos y me dije… “Vamos a comprobar lo que hay mas allá del barranco”… hasta que esa misma noche, ya caliente y empalmado como loco estaba yo pegado a la ventana, prismáticos en ristre y viendo una por una todas las ventanas donde había luz… ¡hasta las cocinas!. Pero nada! Hay que ser tonto! 60 euros en unos prismáticos para ver nubes… “Vuelve a la vida real Javi!”.
Esa noche me acosté a la una bastante cabreado conmigo y mi mente porno, pero a eso de las 2 de la mañana me despertó un sonido familiar y agradable, ¿Me habré dormido otra vez con el porno de teidevisión?… ¡Nooo!, el orgasmo que escuchaba estaba casi allí mismo!. Ostias! Yo espiando las casas al otro lado del barranco y resulta que la escena la tenía al lado de casa. Salté de la cama, sin encender ninguna luz, ostia con la silla, siempre en el medio, salgo corriendo a la ventana, pero… No se ve nada!, El orgasmo terminó, ¿De donde venia?. Me fui al otro lado, a la terraza, salí sin encender la luz y sin hacer ruido… como si fuera culpable de algo, el corazón a 100… en eso que una vez en la terraza oigo ruido de risas y carreritas en un pasillo. Eran justo mis vecinos, la terraza de ellos quedaba justo por debajo de la mía, asi que no me podrían ver, tras el cristal de su puerta, vi una luz encendida y oí más risas de una tía.
Nunca habia visto a esos vecinos, no sabía quienes eran… entonces vi a un tío de unos 20 a 25 años que se reía y corría en bolas con un par de cervezas en una mano, escapaba jugando al “Aquí te pillo”, se notaba que llevaban más de una copa, pero la chica ¡Ahora la vi!… ¡¡En Bolas!! ¡Buena estaba la jodia!, claro que con mi hambre atrasada, me parecería buena hasta una cabra con falda, pero la tía de unos 20 añitos, morena bajita y un buen par de tetas, ella acorraló en la “persecución” al de las cervezas y le arrebató una para derramarla por encima de la polla, ja ja ja! al tío no le hizo gracia, “Cabrona” gritó, pero la agarró por los brazos y la tumbó de frente contra la mesa de madera que tienen en la terraza… y yo con una paja en las manos a punto de saltar!.
El tipo se sabía lo que hacía, se agachó detrás de ella y subiendo – bajando la cabeza le comía coño y culo tan rápido que la tía enseguida dio un alarido de los de “No me importa que me oigan” tan poco le importó que vi que se encendió una luz en la casa de otro/a vecino/a… ahora se me jodió a mi la sesión si se dan cuenta pensé… pero el mirón o mirona se percató y apagó la luz, aunque tambien se quedó a ver el final de la película… je je ¿No le iba a gustar? En eso por mi parte ya estaba que lo echaba por las macetas y la tía se volvió contra el hombre, y dominándolo, lo tumbó en el suelo pija arriba, donde ella se sentó, ahora los dos aullaban, “¿Vais a despertar a todo el mundo, joder?” – pensaba para mi -, asi estuvieron un buen rato, la tía se movía mejor que una actriz porno sobre la polla, subía y bajaba a lo largo y se movía en círculos y luego adelante – atrás, el tipo aulló como si fuera su último polvo (desde luego no les importaban los vecinos) y en ese momento como si yo lo esperara termine de agitar mi enrojecida polla para echarme una corrida bestial en las baldosas… y menuda pena no haber estado allí.
Al siguiente día lo primero fue contárselo a mi colega Fran y después de eso (de esto hace dos meses) me enteré de que el otro mirón que resultó ser un tío que me había visto a mi… ya os contaré, que ahora estoy en el ciber de la plaza de España y tengo que ir a currar. Besos calientes a todas y saludos para vosotros… cachondos.