No lo pude evitar

Soy divorciado desde hace 12 años. Si no fuera por una hija en común, no quiero saber nada de mi ex, pues me fue infiel, razón del divorcio.

Hace unos años, me llamó porque tuvimos que ir al colegio de mi hija a hablar con el jefe de estudios. Una vez salimos del colegio, yo me dispuse a irme pero me dijo que subiera a su casa, que quería hablar conmigo. Yo no quería, pues pasaba de ella, pero me convenció. Subimos a su casa, (digo su casa, porque era de ella antes de casarnos), y me senté en una silla, mientras ella iba ala habitación a soltar el bolso. Al cabo de un rato salió de la habitación, y se había cambiado de ropa. En este caso llevaba una bata, muy por encima de la rodilla y desabrochada en la parte de sus tetas, las cuales casi se salían por el escote. Yo no quería ni mirar, pero inevitablemente, mis ojos se iban hacia su escote. Ella se dio cuenta y se agachaba conscientemente para enseñarme sus tetas a través del escote, por lo que mi polla se empezó a empalmar.

Una de las veces que se agachó, se acercó a mí y sin decir nada me agarró la polla que ya estaba a punto de estallar en mis pantalones. Me bajó la cremallera, me quitó el cinturón y bajándome los pantalones y el bóxer, al saltar mi polla, se la metió en a boca, comenzando una deliciosa mamada. Sus labios subían y bajaban por toda la longitud de mi polla.

No lo pude evitar, la cogí de los brazos, la aupé, le de la vuelta y la coloqué de bruces sobre la mesa del comedor, subiéndole la bata y para mi sorpresa no llevaba ropa interior, por lo que de una vez le inserté mi polla en su coño, comenzando el mete y saca duro, mientras le agarraba las tetas y pellizcaba sus pezones.

Mi polla entraba y salía de su coño, al compás de los gemidos de ella. La saqué, le di la vuelta, y sentándola en la mesa, volví a insertarle la polla en el coño, mientras terminaba de quitarle le bata y chupaba y mamaba de sus tetas. Una vez que nos corrimos casi a la par, me vestí y dándole un beso en cada teta me despedí de ella.