Sometida, follada salvajemente y desde entonces sumisa
📋 Lecturas: ️
⏰ Tiempo estimado de lectura: 06:00 min.
Esta historia es real con un poquito de fantasía sexual (Actualizado).
Fuimos con mi marido a u campo que tenemos en las afueras de la ciudad, llegamos de noche un viernes, el sábado al medio día vino de visita una pareja de un campo vecino, otro jovato con una mina joven, en seguida nos hicimos muy compinches con la mina, mientras lavábamos los platos me dice: ya lo viste al morocho qué morocho le dije, el casero, vive en el rancho aquel al lado de la pileta, es feo pero tiene un físico espectacular. 😜
Es el típico negro con el que todas fantaseamos, no ni idea le dije, acá entre nosotras, yo ya cumplí mi fantasía con él y por lo que se varias vecinas también, ya lo vas a ver, ahí quedó la cosa, a la tarde se les dio por ir a visitar a otra gente en un campo cercano pero yo no quería ir, no conozco a nadie y seguro eran otros vejetes, la mina piola, le dice a mi marido: dejála, se va a aburrir y me guiña el ojo, cuando se van me dice por lo bajo: no seas boluda.
Yo sé lo que te digo y se fueron, yo me había llevado una maya normal porque iba a ver otra gente y otra tipo hilo dental por si podía tomar sol yo sola, en ese momento yo no quería saber nada de tener nada con nadie que no fuera mi marido, aunque el sexo con él siempre había sido aburrido y tradicionalista era mi marido y ni se me cruzaba por la mente tener sexo con otro hombre, pero el hecho de poder estrenar mi micro maya y de paso excitar a alguien y fantasear un poco pudo más y allá fui. 😍
El corpiño eran dos triangulitos corredizos que apenas me tapaban los pezones
La tanguita lo mismo, dos triangulitos, me puse una salida de baño súper cortita que siempre uso y caminé hacia la pileta que está como a una cuadra, pasé por delante del rancho y no había nadie, llegué a la pileta que está rodeada de ligustrinas y ahí estaba el moreno cortándola, lo saludé muy seria como toda una señora y o no escuché o no me saludó, como que no me dio bola, ya empezamos mal. 😎
Ahí me atacó el ego, con más razón todavía me saqué la salida de baño y me quedé prácticamente en bolas y me puse a tomar sol, no es por alardear de nada pero soy bastante voluptuosa, pechos grandes y bien firmes, buena cola y bien parada, a juzgar por las ganas que me tiene más de uno y hasta los pendejos de mi barrio, me hace pensar que no debo estar nada mal, para salud de mi ego podía ver por los lentes ahumados que sí me miraba y cómo, era cierto, tenía un físico espectacular, bastante feo pero todo músculos.
El tipo cortaba y me miraba todo el tiempo, así un buen rato hasta que se empezó a nublar, cada vez más y cuando me quise dar cuenta empezó a llover como un diluvio, el negro se fue al rancho y ahí me quedé juntando las cosas, ni la salida de baño me puse porque todo estaba mojado, empecé a caminar hacia la casa lo más rápido que podía, ni pensaba en el negro pero cuando pasé por la puerta del rancho que tiene un alero me quedé ahí un momento a ver si paraba un poco, entonces salió y se quedó apoyado contra el marco de la puerta, tenía un pantalón de gimnasia y se le notaba perfectamente su erección, no lo disimulaba para nada, arriba en cueros. ❤
Este seguro me coge!!
Se quedó un momento mirándome sin decir palabra y de repente se me acercó muy despacio con los ojos clavados en mis tetas, sin decir palabra, me miró a los ojos y entendí enseguida lo que iba a pasar, suavemente me tomó de las muñecas y me puso contra la pared, yo estaba muda, me dije: una cosa es segura, éste me coge, o me dejo y lo disfruto, estaba muerta de miedo y excitada al mismo tiempo, en sus ojos sabía perfectamente lo que iba a pasar, pero como actuaba suavemente me tranquilicé, ahí estaba medio en bolas entre la pared y este negro para mí enorme porque soy más bien bajita, me quedaba la cara en el pecho de él. 😎
Sin decir una palabra me empezó a acariciar y yo quería alejarlo y zafarme pero era imposible, tampoco hice mucho esfuerzo, deslicé una tímida amenaza y sin darme bola me comió la boca con esos labios enormes y en cuanto me metió la mano entre las piernas ya sabía que estaba perdida, ya no tenía miedo, estaba demasiado caliente para eso, me fue llevando para adentro sin dejar de besarme, voy a tratar de abreviar todo lo que pueda, después de cansarse de comerme la boca me fue llevando hacia abajo muy lentamente pero con firmeza hasta que quedé arrodillada, obviamente me hizo chupársela hasta el cansancio.
Era bastante más grande de lo que yo al menos conocía, pero perfecta, hermosa, no opuse ninguna resistencia, me moría por hacerlo, después me sentó en un viejo sillón, se arrodilló, me separó las piernas, me corrió la tanguita y me empezó a lamer, me hacía gemir todo el tiempo, cuando me metió la lengua me hizo acabar en el acto, se sentó él, me tomó por la cintura y me subió encima como si fuera una pluma, me corrió a los costados los dos triangulitos y me dejó en tetas, me corrió la tanguita, me puso mis manos sobre su pecho. 😜
Me agarró de la cintura y me empezó a penetrar
Todo muy suavemente y sin decir palabra, mientras me penetraba me chupaba las tetas con esa bocaza enorme, me hizo acabar montones de veces, después me hizo arrodillar contra el sillón, me empezó a penetrar por detrás hasta hacerme acabar de nuevo y cuando ya no di más, se sentó, arrodillada al lado de él me agarró una mano y me hizo masturbarlo y chupársela hasta que acabó, el semen le salía a chorros, ahí quedó exhausto. 😘
Aproveché para irme corriendo y dejando todo ahí, los lentes, la salida de baño y me fui pensando que había sido una follada consentida, una cosa rara, llegué a la casa, me vestí de señora y cuando volvió mi marido le insistí para que nos vayamos porque me aburría ja! La verdad me quería ir, en represalia mi marido no me llevó más y va con sus amigos.
Menos mal porque no sabría qué excusa poner, pero de la vergüenza que me daría verlo de nuevo no iría ni loca, después pensando me di cuenta que en realidad lo que quería más que disfrutarme él era hacerme disfrutar a mí, hasta tuvo el cuidado de dejarme acabar todas las veces que quisiera y de acabar afuera, pero el hecho de haberme sometido en todo momento, sin violencia pero con autoridad, hizo que fuera la experiencia sexual más intensa de mi vida. 😁
Nunca un hombre me había hecho gozar de esa manera, sin dolor, sin violencia, logró someterme a su antojo y obligarme a gozar como loca, desde entonces en el sexo me transformo, me vuelvo totalmente sumisa, me gusta sentirme sometida, no digo que no a nada, obedezco totalmente, cada vez que tengo sexo busco revivir esa experiencia que me marcó para siempre, me he masturbado muchas veces recordando.
By: Susi ✔
Tendencia ahora