Como todos estábamos borrachos quién más quien menos, poco a poco de los seis que éramos nos fuimos yendo a dormir yo me retiré después de algunos y antes que otros, en la cocina cuando salí quedaba solo Aldana y Maxi, cuando llegue a la pieza que comparto con Javier, este, como no pudo subir a su cama por la borrachera se había acostado en la mía, no le di bola y saque el colchón de su cama “a mi no me gusta dormir en la parte de arriba de la superpuesta” y lo tiré al piso, no hace frío aquí adentro aunque afuera hace un tornillo, pero el calefactor al máximo mantiene esto calentito, igual me tape con dos frazadas, no se cuanto tiempo pasó pero deduzco que sería una hora más o menos cuando sentí que me tocaban el hombro.
Maxi - Nicolás, Nicolás.
Lo miro interrogándolo con la vista.
Maxi - No hay más frazadas, y mi cama se la agarró el cordobés con la mina.
Nicolás - ¿Y que queréis que haga? Yo no lo traje, lo trajeron ustedes, acostate en la otra.
Maxi - No, está Cristian con su mina.
Nicolás - ¿Y?
Maxi - ¡Dame este colchón, acostate con Javier vos!
Nicolás - ¡Deja de joder, este está en pedo se vomita todo!
Maxi - ¡Dale boludo, hacedme pata, yo te dejo cuando vos necesitas!... ¡Dale forro, nunca cojo y ahora que puedo no me vas a ayudar!
Me levanto de mala gana. El no me dio bola al rezongo y antes de que termine de levantarme ya estaba juntando las frazadas y el colchón, agarró todo y salió con todo a la rastra para la cocina.
Me acuesto al lado de Javi que parece totalmente dormido, lo empujo un poco porque la cama es angosta, no se como acomodarme no puedo dormir boca arriba y si me pongo de costado mirando hacia afuera le doy el culo a Javi, si giro para el otro, tengo su cara frente a mí, pero entonces el se da vuelta y pone el culo hacia el centro de la cama, yo hago lo mismo y aunque siento los cachetes calentitos de su culo contra los míos unos minutos, por lo que me siento incomodo, pero luego me duermo por el cansancio y la borrachera, me despierto boca arriba, en mis manos tengo las de Javi que me acaricia la pija, ya la tengo dura, no se cuanto hace que me la toca, no se por qué no doy muestras de haberme despertado, me quedo sin reaccionar, pienso a mil, (“está dormido y me confunde con la mina”, - medio boludo porque aún dormido, no puede confundir una pija con una concha) - unos segundos me late el corazón a full, él tiene una mano acariciándome y trata de meterla por debajo del elástico de mi calzoncillo, yo tengo mi mano sobre la suya y trato de que no lo haga, me pongo tenso, no quiero hablar por temor a que los de la pieza de al lado escuchen, pero entonces él se apoya en el codo, - recién me avivo que tiene su cara sobre mi pecho - y comienza a correrse para abajo mientras con la boca y la lengua me acaricia la tetilla, la panza, mete la lengua en mi ombligo no deja de querer tocarme la pija dentro del calzón. Reacciono y sigo pensando que está dormido, lo freno con las manos y le hablo despacio.
Nicolás - Javi, boludo, soy yo (Le pongo la mano entre su boca y mi cuerpo, su boca ya está llegando a los pelos, pero me pasa la lengua y me besa la mano).
Con la otra mano lo agarro suave de los pelos, pero se pone firme y hace fuerza con la cabeza, con la boca me roza la parte de abajo de la cabeza de la pija por encima del calzón, siento los labios que me la aprietan. Le tiro más fuerte los de pelos, y como reacciona me rescato que parece despierto.
Nicolás - Javi, (Le hablo en secreto) Javi que haces boludo, despiértate.
Me congelo cuando habla sin dejar de acariciarme, me chupa los pelos y la cabecita de la garcha que se salió del elástico por entre mis dedos que tratan de cubrirla, con la mano me acaricia los huevos por arriba del calzón.
Javier - Estoy despierto…muy despierto.
No me muevo por unos segundos, me aflojo todo, él aprovecha y me baja el calzoncillo y de golpe se mete toda la pija - que ya la tengo muerta - en la boca, siento su garganta y sus babas o algo calentito en la garcha dentro de su boca y los labios que me aprietan el tronco contra los huevos, trato de sacarlo, sin esforzarme mucho, para no hacer ruido y tal ves porque no quiero.
Javi habla bajo y suavecito, me dice - ¿No te gusta? Dejadme… un ratito
Hace fuerza con la cabeza soportando el tirón de pelos, tiemblo entero, en la pieza de al lado está Cristian con la mina, no creo que escuche porque Maxi cerró la puerta al salir y porque ya debe estar dormido con la curda y los polvos que se habrá echado pero igual tengo miedo, le aflojo los pelos y lo dejo hacer.
Nicolás - ¿Te gusta esto?
Javier - No hables. Te va a gustar, dejadme a mí, no hables.
Por unos minutos con la boca me acaricia la pija, los pelos de los huevos, trata de meterse los dos huevos a la vez dentro de la boca, no puede por mi posición, con la mano trata de que abra las piernas, lo entiendo y me acomodo para que la pueda chupar bien, ya lo acaricio en los pelos, otra vez se me está parando la pija, se corre más abajo, me acomodo mejor y arrollo las piernas, él se a puesto entre mis piernas y con la lengua hace maravillas en mis huevos, se entusiasma y baja la lengua para el lado del culo, le mesquino haciendo para abajo, así varias veces con la puntita de la lengua empieza en la zanja y moviéndola contra mí a mil por hora, sube por los huevos, por la panza de la pija hasta abajo de la cabecita, - como mueve la lengua bien en el triangulito que se forma ahí - la tengo apoyada contra mi cuerpo por la posición, estoy boca arriba, trato de metérsela en la boca, la levanta de contra el ombligo con los dedos y de un empujón la traga entera, esta vez si siento su garganta, empujo levantando el cuerpo y sosteniéndole la cabeza con las dos manos pero igual se la saca, y repite esta operación varias veces hasta que se da cuenta que estoy desesperado por acabar y se la quiero meter dentro de la boca, la agarra con la boca la sostiene fuerte casi me muerde, mete un brazo debajo de una de mis piernas sin sacarse la pija de la boca y entiendo que quiere que me de vuelta, lo ayudo y queda boca arriba con mi pija ahí adentro y con mis rodillas entre sus axilas me apoyo en los codos y lo empiezo a bombear, con las dos manos trata de que no lo ahogue con los pijazos, pero le gusta, siento sus babas calientes o mi leche no se que es, bombeo más fuerte voy a acabar se da cuenta y me agarra - no me avivo que de los cachetes del culo - estoy desesperado…ya viene... le empujo y la aguanta, siento como la cabeza le entra en la garganta y los huevos contra los labios, dos, tres, o cuatro empujones así y se la dejo bien al fondo mientras acabo empujando sin sacarla ni un poquito, dos, tres, cuatro chorritos de leche y me aflojo, levanto el culo para sacársela - ahí me avivo que me tiene agarrado los dos cachetes del orto, y yo de los pelos con las dos manos - cierra la boca y le da la última chupada, igual se la saco y me hago de costado, noto que se seca los ojos y lo toco, tiene lágrimas en los ojos de la ahogada que le dí, quedamos así unos segundos, yo de costado, escuchando, no se si hicimos ruido no oigo nada, parece que nadie oyó nada. Me agarra una mano, me apreta fuerte, afloja y se levanta a oscuras, sale de la habitación, me acomodo y me tapo de nuevo me quedo quieto como está la puerta abierta ya no está tan oscura la pieza veo la botella de whisky tomo un trago justo cuando él vuelve estira la mano, le alcanzo la botella toma un trago largo, lo miro baja la vista, sabe que lo miro, vuelve a salir, tomo otro trago también largo, otro más “así me duermo” pienso, lo escucho venir, me levanto y voy a mear, la puerta de la cocina está trabada con una silla o algo, poniendo las manos y la cara contra el vidrio logro ver a Maxi y la mina durmiendo, voy al baño, meo y de pasada me acerco a la pieza donde está Cristian, roncan, él, y la mina peor todavía, ellos estaban los dos borrachos. Vuelvo a la pieza hace frío, pienso buscar un buzo, trato de prender la luz y no enciende.
Nicolás - ¡La concha de su madre!, no anda. (Busco a tientas en el piso el que tenia puesto antes a acostarme, me lo pongo cierro la puerta y me acuesto)
Javier - ¿Te dio frío?
Nicolás - Si un poco.
Javier - ¿Estás nervioso?
Nicolás - Si, un poco.
Javier - ¿Todo un poco? (Trata de tocarme la pija) ¡Esta no fue un poco, esta fue toda!
Le sostengo la mano antes de que llegue.
Nicolás - Si… ya está.
Javier - ¿Te asombra, o te enoja?
Nicolás - No, me asombra, ¿Por qué me iba a enojar?... solo que nunca creí.
Javier - ¿Que me guste la pija? ¿Por qué no?
Nicolás - No se, digo yo…igual está todo bien, solo me sorprendió,…más que lo hagas conmigo.
Javier - Se dio… no aguanté al tenerte tan cerca y como vos siempre decís que probarías lo que venga, pensé que no te ibas a calentar, (Cambia el tono) pero me equivoqué, te calentaste, que bueno que te gustara. ¿Me pasas la botella?.
Nicolás - Quedó de ese lado.
Se agacha a buscarla y a propósito estira el culo para rozarme, está en bolas, toma un trago y me pasa la botella, me corro un poco y se queda de costado con el culo hacia mí, se arrima y estira una mano, me agarra de costado como para que lo apoye, me dejo llevar y lo apoyo, está calentito, lo apoyo pero tengo la mano en su hombro, me la agarra y la baja hasta su panza para que lo apreté, la lleva hasta sus cachetes y hace que lo acaricie, tiene el culo bien formadito, lo toco es durito bien firme, lindo aunque peludo, me gusta, quedamos así unos minutos, yo acariciándole el culo, se queda quieto, lo disfruta… me baja en parte el calzoncillo y yo termino de sacármelo pero la pija no se me a parado, lo apoyo más fuerte se la pongo entre la zanja así muerta como está, está amontonada, no entra y trato de acomodarlo soliviándolo, me olvidé que no es mina y para acomodarlo le metí la mano adelante, la puse bien sobre la pija de él, la tiene medio muerta, saco rápido la mano, lo agarro un poco más abajo se sonríe y me ayuda acomodando el culito contra mi verga todavía muerta, por unos minutos lo franeleo con la garcha para que se me pare.
Javier - Toma
Dice mientras me da un sobrecito que sacó de bajo la almohada.
Nicolás - ¿Qué es?
Javier - Una crema, pásate…dame.
Me quita otra vez el sobrecito y lo abre con los dientes parece que se lo puso en la palma de la mano. No se ve nada, porque la pieza está re-oscura, pero ahora me agarra la pija como para pajearme y siento la crema fría, la desparrama bien por toda mi pija con los dedos, es muy hábil con esos dedos, está fría pero me comienza a picar.
Nicolás - Pica, ¿Qué es?
Javier - Ambuss, es buena, unos segundos te arde, hasta que se te para, después ya no.
Nicolás - ¿Es para que se pare?... ¿Crees que no puedo solo?
Javier - Si podéis, pero es una ayudita.
Es verdad, siento la pija caliente y cada vez más dura, ya no pica tanto, vuelvo a apoyarlo y él pone las dos manos suyas juntas contra su pera y se entrega, lo hurgueteo un rato le acaricio los cachetes, son cada vez más lindos, se queja cada vez que lo rasguño o lo aprieto fuerte. No se la puedo poner por más que él me ayuda, la mojo con saliva pero igual no la emboco, apenas la puntita y no quiero acabar sin ponérsela, él también la busca, estoy casi arriba de él, se pone boca abajo y quedo sobre él.
Javier - Mojala, está muy seca. Mojala bien
Me arrodillo para poner saliva en mi mano y pasarla por la garcha, él agarra la almohada la arrolla y se la pone debajo a la altura de la pija se vuelve a acostar boca abajo y le queda el culito bien levantado lo siento al tocarlo aunque no lo veo por la oscuridad, me dejo llevar me acerco y le muerdo un cachete, el otro, son bien duros el lo disfruta lo levanta y lo mueve le hecho un pollo en la zanja con el dedo le busco el agujero y se lo meto, se mueve para todos lados de nuevo me mojo la pija, le hecho otra escupida en el culo, casi se la coloco en el agujero con la lengua, tengo pegajosa la saliva y raspo mi lengua contra los dientes de arriba para que caiga, por eso casi le meto la lengua en el orto, otra vez toco que tenga la pija mojada y me acomodo arriba de él, una vez le erré, pero le rozo la puertita, él se acomoda, yo también, pruebo de nuevo y esta vez la emboco, y empujo, siento las paredes de adentro suyo calientes, él apenas se queja, afloja, se hace hacia abajo para que no le entre pero no puede mucho por la almohada, trato de meterle la mano abajo y lo logro, pero no hace falta sostenerlo mucho, ayudado por mi brazo levanta bien firme la colita, hace fuerza para arriba y le entra hasta el fondo. Lo tengo agarrado de la pija que la tiene bien dura, ya no me importa, le doy una serruchada padre, nunca una mina me dio el culo así, (Nunca había hecho un culo a un macho en realidad). Acabo y sigo bombeando hasta que me arde la pija, cuando no aguanto moverme más del cosquilleo que siento, paro, pero la sigo teniendo dura. Igual me bajo y me tiro en la cama.
Estiro la mano y manoteo la botella así acostado le doy un trago, otro y otro y otro más, ya estoy medio borracho. Igual trato de pensar en lo que está pasando y no puedo, no la tengo muy clara otro trago y Javi me saca la botella, toma él y me la devuelve, tomo más y me corro hacia delante en la cama me agacho para dejar la botella a un costado todavía tengo la pija dura que choca de costado en el colchón, cuando me estiro hacia abajo Javi se acerca y me apoya, tiene la pija parada la siento contra los cachetes.
Nicolás - ¿Para, que hacéis?
Javier - Por favor dejadme acabar a mí también, o me van a doler los huevos, dame unos minutos, por favor te apoyo nada más, por arriba.
Mientras se acomodaba mejor, y yo protesté pero no hice nada para que salga me comenzó a acariciar mientras me apoyaba la garcha entre la zanja, se fue corriendo hacia abajo pasándome la lengua por la columna y así llegó hasta la zanja del culo me agarró con las dos manos y me puso culo para arriba, yo supongo no lo quise evitar, empezó a pasar otra vez su lengua movediza, esta vez por la puerta del culo más y más y más, ya me está gustando, siento como la lengua se mete adentro de mi culo, “Que sensación”, quiero más, parece que hace lo que quiere con esa lengua, cuanto hace que me chupa el culo, no sé, no me di cuenta del tiempo. Pone la almohada debajo mí, se que me va a cojer y no hago nada para evitarlo, lo siento cuando se sube Y busca ponérmela no se si quiero pero no lo evito, la acomoda con la mano me emboca la cabeza y me duele, hago fuerza de golpe hacia adelante y se sale.
Nicolás - ¡Ay, ya está! ¡Ya está!
Javier - Un poquito, apenas, si no te gusta me decís, pero te va a gustar, dejadme probar.
Mientras habla me sostiene con los dos brazos para que no pueda darme vuelta, es fuerte no me deja dar vuelta, cuando ve que ya no hago fuerza afloja un brazo pero me tiene con el otro, busca algo en la cabecera, sin soltarme siempre arriba mío, es otro sobrecito lo abre con los dientes. Creo que se lo pone en la pija.
Javier - Es crema para que no te duela. Igual si no queréis avísame.
Siento sus dedos con crema entre la zanja y luego dentro del culo un dedo con crema o algo frío, ahora otra vez se acomoda él, y la pija me roza la puerta, me entra un pedacito y me quejo, me duele, me duele pero no quiero que la saque.
Nicolás - ¡Ya está, basta, ya está!
Javier - No, apenas te entró la cabecita, solo la cabecita te puse, aguanta un poquito más,
De nuevo me la saca y la moja más con saliva sumada a la crema, con los dedos me pone saliva en el culo lo siento todo enchastrado, y otra vez se acomoda esta ves la emboca enseguida y me entra más fácil aunque sigue doliendo (“si es solo la cabeza, debe ser re-pijudo este”... pienso). Me acomoda mejor con los brazos y lo ayudo, creo que me gusta, él acomoda la almohada y me ubica arriba, pone una mano sobre mi hombro con la otra mano me abre un poco las piernas termina de abrirme las piernas con las rodillas y lo siento acomodarse, ahora siento como la roza contra ni culo de costado, (es para mojarla yo también lo hago), siento su mano cuando la emboca me pone un pedacito (Lo mismo hago yo, cuando hago un culo) y pasa su brazo debajo mío, lo estaba empezando a disfrutar cuando siento el empujón, me hizo ver las estrellas trato de safar pero me tiene ensartado, con toda la pija dentro de mí, con el brazo me sostiene y tiene fuerza, con esa mano me agarra la pija que la tengo toda mojada no se si acabo o no, con la otra mano en mi hombro hace fuerza hacia abajo y le sirve de sostén, no tengo como safar se apoya contra mí y no me la saca, bombea sin sacarla, sufro, sufro…ya no tanto, ya no tanto, ya no duele, me gusta, parece que acaba siento como se contrae y goza, hasta que se afloja, no siento la leche pero se que acabó, no me suelta por unos segundos, me quedo quieto, él sobre mí me sigue teniendo aunque ya no hace fuerza, siento como se le muere la pija dentro de mi culo y se va saliendo sola, cuando se sale, él se baja se acuesta a mi lado, busca y con su calzoncillo me seca el culo, luego me besa la espalda, se acomoda hacia arriba, me pasa el calzoncillo mío, se pone el suyo se estira levanta la botella toma un trago y me la pasa, se acuesta, se tapa con el culo hacia mí, y se duerme.
Esa fue la única vez que cogí y me hice coger con un hombre. Nunca más hablamos del tema con Javier a pesar de que trabajamos juntos mucho tiempo más, jamás comentamos lo que pasó esa noche, ni entre nosotros ni con nadie supongo, yo al menos no lo hice. Pero creo que me gustó, y estoy seguro que a él también. Debe darnos vergüenza ser putos supongo, será por eso que no lo hablamos ni lo repetimos, yo no lo había hecho antes con un varón y no lo hice nunca más con otro tipo, él no sé.
Me alegro que fuera él quien me hizo debutar porque lo quiero mucho como amigo, somos muy buenos amigos, los mejores supongo, es que tenemos un secreto en común.
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