Buenas a todos/as, ya se que han subido muchos relatos con este título, pero mi primera vez fue un poco... llamemosla, ...extraña.
Bueno, esto sucedió hará como unos 5 años. Yo, en estos momentos, cuento con 24 (en poco más de un mes cumpliré 25) y mi pareja es dos años mayor que yo.
Lo cierto es que tardamos casi dos años como pareja para mantener nuestra primera relación sexual (también era la primera vez para ambos, ya que éramos vírgenes los dos) y, como ya he contado antes, fue algo extraña, aunque más que extraña, la palabra correcta sería incompleta, ya verán el por qué.
Ese día veníamos de pasar la mañana en la playa ya que hacía bastante calor. Cuando llegamos a casa la casa estaba vacía, es decir, nos encontramos con que estábamos solos, no estaban ni mis padres ni mi hermano.
Al llegar u comprobar este echo, que estábamos solos, se me ocurrió el proponerla hacer el amor y cual fue mi sorpresa que me respondió que si.
Bueno pues subimos a mi habitación, empezamos por besarnos, seguimos por quitarnos la ropa y, finalmente, me propuse a penetrarla.
Como era nuestra primera vez, fue algo extraño, ya que ninguno sabíamos que hacer o como comenzar, pero allá que fui.
Comencé acariciando la punta de mi pene por su clítoris y los labios vaginales. Después de ves que se empezaba a mojar, me dispuse a penetrarla.
Ahí fue que empezó a sentir dolor y me paré. Volví a intentar por varias veces hasta que decidí, tras varios intentos fallidos por que la dolía, metérsela de un golpe con fuerza. Pegó un sonoro grito de dolor, pero hice lo que pensé que era mejor y comencé con el mete-saca tradicional.
Al cabo de un rato y tras haber probado varias posiciones y lugares de la casa diferentes, oigo que suena el girar de una llave en la puerta de casa, mierda!!!! (pensé)
- Corre Manoli (Nombre de mi pareja), corre. Vete a mi habitación a vestirte que yo haré me meteré en la ducha para disimular.
Y eso es lo que hicimos, disimular como pudimos.
Por suerte no nos pillaron ni sospechó nadie, quedamos como que acabábamos de llegar de la playa y por eso me estaba metiendo en la ducha. Menos mal.
Por eso decía lo de que fue algo raro, porque para una vez que por fin habíamos encontrado un hueco para poder hacerlo, llegaron mis padres y nos cortaron el rollo, que marrón.
Bueno, eso no es todo, después de esa primera vez, nos volvimos "adictos" al sexo, no se si es por la espera o no se por que, pero el caso es que desde ese día no hemos parado de practicarlo y probado diversas formas, posturas y lugares para hacerlo.
Ya me pasaré por aquí otro día y contaré alguna otra anécdota, porque lo cierto es que desde entonces, que han pasado 5 años, hemos vivido muchísimas aventuras.
Me gustaría, ya que es mi primer relato, que comentarais y me dijerais los defectos que haya tenido al contar esto para mejorar los próximos.
Un saludo a toda la comunidad.